El nuevo hallazgo, bautizado como Gaia BH3, ha sido identificado gracias a los datos proporcionados por el telescopio espacial Gaia de la Agencia Espacial Europea, especializado en el rastreo del movimiento de miles de millones de estrellas en nuestra galaxia. Este agujero negro estelar, situado en la constelación de Aquila, pesa 33 veces la masa del Sol, lo que lo convierte en el más masivo detectado hasta la fecha en la Vía Láctea. Su descubrimiento no solo proporciona una visión más profunda sobre los agujeros negros estelares sino que también plantea preguntas sobre cuántos más podrían estar escondidos en nuestra galaxia, invisibles hasta ahora.
La importancia de Gaia BH3 no reside solo en su masa, sino en su proximidad a nuestro sistema solar, lo que permite a los astrónomos estudiar con más detalle las características y el entorno de estos fenómenos cósmicos. El agujero negro interactúa gravitacionalmente con una estrella compañera, cuyo inusual movimiento orbital sugirió inicialmente la presencia del agujero negro. Este tipo de interacciones proporciona una oportunidad única para estudiar la dinámica y la evolución de los sistemas binarios que incluyen agujeros negros.
Los investigadores destacan que, a pesar de su gran masa, Gaia BH3 no representa una amenaza para nuestro planeta. Su campo gravitacional, similar al de una estrella de masa equivalente, y su estado "dormido", es decir, sin una acumulación activa de material, lo convierten en un objeto de estudio ideal y no en un peligro inminente. Este descubrimiento también refuerza la idea de que los agujeros negros estelares pueden formarse en diversas condiciones y no necesariamente solo en las más extremas.
Este hallazgo es crucial para entender cómo se distribuyen los agujeros negros en la Vía Láctea y cómo interactúan con otros cuerpos celestes. La detección de Gaia BH3 fue posible gracias a la precisión sin precedentes de Gaia en la medición de la posición y el movimiento de las estrellas, lo que permite identificar incluso las más sutiles influencias gravitacionales de objetos ocultos como los agujeros negros.