Los estallidos de radio rápidos, o FRBs, son destellos breves pero intensos de luz de radio que duran solo una fracción de segundo y tienen su origen en eventos astrofísicos extremadamente energéticos. Se cree que estos fenómenos son causados por magnetars, que son estrellas de neutrones con campos magnéticos increíblemente intensos.
Un equipo de investigadores ha publicado un estudio en The Astrophysical Journal Letters sobre el FRB 20240209A, un estallido que presenta características inusuales y desafía las teorías existentes sobre el origen de estos eventos. Detectado por el telescopio de radio CHIME en febrero de 2024, el FRB 20240209A es un repetidor que fue observado 21 veces entre febrero y junio de 2024. Además, seis eventos adicionales fueron registrados desde un observatorio compañero a 60 kilómetros de distancia, lo que permitió precisar su ubicación a aproximadamente dos mil millones de años luz de distancia.
Lo que distingue al FRB 20240209A de otros estallidos es su origen en la región periférica de una galaxia elíptica antigua, en lugar del centro galáctico comúnmente asociado con estos eventos. La galaxia anfitriona tiene más de 11 mil millones de años, ha agotado la mayor parte de su gas y polvo formadores de estrellas y es clasificada como quiescente, con una tasa de formación estelar menor a 0.31 M⊙ por año. El corrimiento al rojo medido es de z = 0.1384 ± 0.0004, y el modelado de la población estelar infería una masa estelar media de log(M*/M⊙) = 11.35 ± 0.01 y una edad de población estelar ponderada por masa de aproximadamente 11 mil millones de años.
Esta observación desafía la creencia de que los FRBs son causados únicamente por magnetars jóvenes. Los datos sugieren que el magnetar responsable del FRB 20240209A es también antiguo, lo que implica que los procesos astrofísicos que generan FRBs pueden ser más variados de lo que se pensaba anteriormente. Se especula que el evento podría haber ocurrido en un cúmulo globular denso en el borde de la galaxia, donde se producen numerosas fusiones estelares. Una posible explicación es que el FRB fue causado por magnetars en fusión, que liberan energía de radio al fusionar sus campos magnéticos.
El hallazgo sugiere que algunos estallidos de radio rápidos pueden surgir de procesos distintos a la colapso de núcleos de estrellas masivas, fenómeno similar a lo observado en los estallidos de rayos gamma de corta duración y supernovas de tipo Ia.
T. Eftekhari, coautor del estudio, reflexionó sobre el impacto de este descubrimiento: "Descubrimientos como el FRB 20240209A nos obligan a reconsiderar lo que sabemos sobre la formación y las fuentes de los estallidos de radio rápidos."
Este descubrimiento pone de manifiesto la necesidad de continuar investigando la diversidad de procesos astrofísicos que pueden dar lugar a estos misteriosos y potentes estallidos de radio. La naturaleza inusual del FRB 20240209A proporciona una nueva perspectiva sobre la formación y evolución de magnetars, subrayando la complejidad del universo y los eventos que ocurren en él.