Amazon, a través de su filial Amazon MGM Studios, ha adquirido el control creativo de la franquicia de James Bond por una suma superior a los 1.000 millones de dólares, equivalente a aproximadamente 790 millones de libras esterlinas. Esta histórica transacción, reportada inicialmente por Deadline, fue negociada con Barbara Broccoli y Michael G. Wilson, los administradores de legados del productor Albert "Cubby" Broccoli. Durante décadas, estos herederos británico-estadounidenses han sido los encargados de preservar y desarrollar una de las sagas cinematográficas más reconocidas de todos los tiempos.
El acuerdo otorga a Amazon derechos plenos sobre la propiedad intelectual de James Bond, permitiéndole desarrollar nuevos proyectos, incluidas películas y, potencialmente, series de televisión, sin la necesidad de autorización de Broccoli y Wilson. Esta decisión refleja una transformación significativa en la manera en que continuará la narrativa del famoso espía británico. Además, el pacto llega cuatro años después del lanzamiento de "No Time to Die" en 2021, marcando el periodo de inactividad más largo de la saga desde su inicio.
A pesar de lo prometedor para los futuros proyectos, la decisión ha suscitado reacciones mixtas entre los miembros de la franquicia. Daniel Craig, quien protagonizó a James Bond en sus últimas cinco entregas, mostró respeto hacia los anteriores guardianes creativos. En contraste, Valerie Leon, ex "Bond girl", señaló su preocupación por la posible pérdida de la esencia británica del personaje bajo la dirección de una compañía estadounidense.
Hasta el momento, no se han anunciado nuevas producciones en curso respecto al personaje, pero el control obtenido por Amazon abre la posibilidad de innovaciones tanto en pantalla grande como en el ámbito televisivo. Esto podría significar una oportunidad para expandir el universo de Bond, aunque también genera ciertas reservas sobre el impacto en el legado clásico de la franquicia.
Los detalles completos de la transacción permanecen confidenciales, pero el impacto de esta compra ya está siendo ampliamente debatido. Este movimiento por parte de Amazon subraya su interés en fortalecer su catálogo de contenido exclusivo y mantener una posición competitiva en la industria del entretenimiento global en rápida evolución. La saga de James Bond tiene más de 60 años de historia y es una de las franquicias más taquilleras del cine, con ingresos globales totales que superan los 7.000 millones de dólares.