El arma láser, que alcanza una potencia de 2.47 kW a una temperatura ambiente de 20 °C, puede inutilizar drones y cortar diversos materiales a más de 1 kilómetro de distancia. Su operación eficiente en el rango térmico de -50 °C a 50 °C fue posible gracias a un diseño de bombeo láser de 940 nanómetros, que genera menos calor en comparación con sistemas tradicionales y minimiza la necesidad de mecanismos voluminosos de refrigeración.
Para optimizar el desempeño, el sistema emplea una arquitectura con 9 diodos de inyección de luz hacia adelante y 18 hacia atrás, distribuyendo la óptica de manera eficaz y protegiendo los componentes sensibles al calor al ubicarlos fuera de la cavidad láser principal. También incorpora una fibra enrollada de aproximadamente 8 cm de diámetro, lo cual suprime modos parasitarios y estabiliza el haz, evitando pérdida de energía e inestabilidad.
El núcleo de fibra dopada con ytterbium, un metal raro presente en grandes reservas en China, logra un 71% de eficiencia en la conversión de energía en luz láser, lo que contribuye al bajo nivel de calor residual y la alta eficiencia operativa del dispositivo.
Una de las características destacadas del desarrollo es su portabilidad: la estructura completa es lo suficientemente compacta como para transportarse en una maleta, a diferencia de sistemas como el HELMA-P de Francia o el IDDIS de India, que requieren camiones para trasladar los equipos de enfriamiento. Esta condición facilita su uso tanto para aplicaciones militares —como defensa contra drones— como industriales, incluidos el corte de precisión y la soldadura en ambientes fabriles.
La investigación, liderada por Chen Jinbao y con la colaboración de la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa de China, logró resolver el desafío de mantener un rendimiento constante del láser frente a variaciones de temperatura de hasta 100 grados Celsius, problemática que había limitado la movilidad y operatividad de los sistemas láser de alta potencia durante décadas. Los resultados se encuentran próximos a publicarse en la revista científica "Higher Power Laser and Particle Beams".
Esta innovación representa un salto significativo en la tecnología láser aplicada tanto en defensa como en la industria, al permitir un despliegue instantáneo y efectivo en cualquier región del planeta, independientemente de las condiciones climáticas o la infraestructura disponible.