La supercomputadora neuromórfica instalada en la Universidad de Leipzig, Alemania, representa un avance significativo en el ámbito de la computación de alto rendimiento aplicada a la medicina personalizada y la investigación farmacéutica. Desarrollada por la startup SpiNNcloud, la máquina utiliza una arquitectura que emula el funcionamiento cerebral, con 650,000 núcleos distribuidos en 4,320 chips de segunda generación SpiNNaker2. La capacidad de procesamiento permite simular simultáneamente hasta 10,500 millones de neuronas, volviéndola una herramienta indispensable para el modelado de sistemas biológicos complejos.
Cada placa de servidor de la supercomputadora integra 48 chips SpiNNaker2, y cada uno de estos chips posee 152 núcleos ARM junto con aceleradores especializados para tareas intensivas. Este diseño posibilita una velocidad de cribado molecular que supera ampliamente a las plataformas tradicionales: el sistema es capaz de analizar 20 mil millones de moléculas en menos de una hora, un rendimiento dos órdenes de magnitud superior al obtenido por una infraestructura de 1,000 núcleos de CPU estándar.
La eficiencia energética es otro aspecto fundamental del sistema. Con un consumo 18 veces inferior al de las GPU convencionales, la supercomputadora reduce significativamente los desafíos asociados a la energía y la refrigeración, condiciones esenciales para aplicaciones científicas de alto volumen computacional.
El principal uso de esta infraestructura se centra en la simulación de proteínas para la investigación y desarrollo de medicamentos personalizados. Según Christian Mayr y Hector Gonzalez, cofundadores de SpiNNcloud, la arquitectura neuromórfica está especialmente diseñada para implementar algoritmos que requieren sparsidad dinámica y altos niveles de paralelismo, permitiendo abordar problemas computacionales que antes eran inabordables debido a restricciones de hardware.
La tecnología de SpiNNcloud ha comenzado a ser adoptada por instituciones de investigación líderes tanto en Europa como en Estados Unidos, lo que subraya su versatilidad y rendimiento destacado frente a alternativas previas. El impacto potencial de esta supercomputadora es especialmente relevante en el descubrimiento de fármacos, al permitir simulaciones complejas en tiempos reducidos y con menor consumo de recursos, abriendo nuevas vías para el desarrollo de terapias médicas más precisas.