Un equipo de la Universidad de Zhejiang, China, ha desarrollado un innovador vidrio autolimpiante capaz de eliminar hasta el 98% de las partículas y el polvo adherido a su superficie en apenas segundos, gracias a la aplicación de campos eléctricos. Este nuevo material, de solo 0.62 milímetros de grosor, no requiere agua, productos químicos ni tareas manuales, ofreciendo una alternativa eficiente a los métodos de limpieza convencionales.
La tecnología consiste en la incorporación de electrodos grabados en la hoja de vidrio, los cuales generan un campo eléctrico alterno. Este campo provoca que las partículas cargadas se desplacen, varíen su dirección o incluso se desprendan completamente del vidrio. En pruebas bajo condiciones polvorientas, el sistema reportó una eficiencia superior al 95% en la remoción de partículas.
Además, la activación del campo eléctrico produce un "efecto de escudo de partículas", disminuyendo la acumulación de polvo en la superficie y pudiendo reducir hasta en un 90% la cantidad de polvo suspendido en el aire cerca del vidrio. Este mecanismo se vuelve especialmente útil en entornos con alta concentración de polvo, como durante tormentas de arena.
El proceso de fabricación involucra la grabación de electrodos sobre la lámina de vidrio y su cobertura con una película protectora fina, lo que permite una producción compatible con las tecnologías industriales existentes, sin la necesidad de maquinaria especializada ni elevados costos adicionales.
Entre las aplicaciones propuestas por los desarrolladores se encuentran paneles solares, ventanas de edificios de gran altura y otras superficies donde la limpieza resulta costosa y compleja.
Los detalles de este avance fueron publicados en la revista Advanced Science, destacando los beneficios de una solución sostenible frente a métodos tradicionales que demandan mayor tiempo y recursos para el mantenimiento de superficies de vidrio.