Elon Musk, conocido por sus audaces predicciones en el ámbito tecnológico, ha afirmado recientemente que la inteligencia artificial (IA) podría superar la inteligencia humana en términos de capacidades individuales para finales del próximo año. Esta predicción representa una revisión de sus anteriores estimaciones, acortando el plazo previsto para el desarrollo de una IA superhumana. Durante una entrevista en su plataforma X (anteriormente conocida como Twitter), Musk destacó el rápido avance de la tecnología de IA, impulsado por el incremento exponencial en el hardware dedicado y los avances en el software.
A pesar de la promesa de progreso, Musk también señaló desafíos significativos, incluyendo la escasez de componentes críticos como los microprocesadores y las crecientes demandas de energía. El año pasado, la industria enfrentó restricciones debido a la disponibilidad limitada de chips de entrenamiento de IA, esencialmente los fabricados por Nvidia. Para este año, la atención se desplaza hacia el suministro de transformadores de voltaje, mientras que en el futuro cercano, la disponibilidad de electricidad podría convertirse en el principal cuello de botella.
Musk, cuya empresa xAI está desarrollando Grok, un chatbot de IA avanzado, se mantiene optimista sobre superar estas barreras. Él comparte que Grok podría ser equiparable o incluso superior a GPT-4, el modelo de IA actual de referencia. La carrera por la supremacía en IA se ve intensificada por la participación activa de las mentes más brillantes del mundo, según Musk, quienes están migrando al campo de la IA debido a su progresión vertiginosa.
La visión de Musk no es unánime en la comunidad tecnológica. Algunos expertos, como Demis Hassabis de DeepMind y Jensen Huang de Nvidia, proyectan un plazo más largo para el logro de una inteligencia general artificial (AGI), capaz de realizar cualquier tarea intelectual humana con igual o mayor competencia. Mientras Musk proyecta una evolución rápida de la IA, advierte sobre la necesidad de abordar los dilemas éticos y de seguridad inherentes al desarrollo acelerado de la tecnología, reflejando su participación en debates sobre el impacto futuro de la IA en la humanidad.