La noticia del fallecimiento de Maggie Smith fue anunciada por sus hijos, Chris Larkin y Toby Stephens, quienes informaron que la actriz murió acompañada por sus seres queridos. Maggie Smith dejó un legado compuesto por dos hijos y cinco nietos.
A lo largo de una ilustre carrera que comenzó en la década de 1950, Smith acumuló numerosos galardones, incluidos dos premios Oscar. El primero llegó en 1970 por su interpretación en *The Prime of Miss Jean Brodie* y el segundo en 1979 por su actuación en *California Suite*. Además, fue laureada con ocho premios BAFTA y tres premios Emmy, consolidando su reputación como una de las actrices más talentosas de su generación. En reconocimiento a su contribución al arte dramático, fue nombrada Dama Comandante del Imperio Británico en 1990.
Entre los papeles más célebres de Smith se incluyen la profesora Minerva McGonagall en la serie de películas de *Harry Potter* y la Condesa Viuda de Grantham en *Downton Abbey*. Por este último papel, ganó dos premios Emmy y fue nominada en otras dos ocasiones, destacándose por sus diálogos ingeniosos y su aguda inteligencia.
A lo largo de su carrera, Smith demostró una notable versatilidad en el escenario y la pantalla, sobresaliendo en una variedad de géneros y estilos. Su repertorio teatral incluyó producciones como *Hedda Gabler*, *Othello*, y *A Room With a View*. En el cine, fue aclamada por actuaciones en películas como *Gosford Park*, *The Best Exotic Marigold Hotel*, y *The Lady in the Van*.
El legado de Maggie Smith fue homenajeado por figuras prominentes como el Rey Carlos y el Primer Ministro británico, quienes destacaron su contribución al patrimonio cultural del Reino Unido. "Fue un tesoro nacional" expresaron. Daniel Radcliffe, conocido por su papel de Harry Potter, elogió su "inteligencia feroz" y la describió como una actriz "legendaria". Otros colegas, incluyendo a Hugh Bonneville y Whoopi Goldberg, también compartieron recuerdos afectuosos y anécdotas sobre su talento y carácter.
En 2009, Smith fue diagnosticada con cáncer de mama a los 74 años. No obstante, enfrentó la enfermedad con valentía, se recuperó y continuó trabajando en cine y televisión. Su carrera abarcó más de ocho décadas, dejando una huella duradera en el mundo del entretenimiento, un testimonio de su dedicación y talento.