A pesar de las restricciones de exportación impuestas por Estados Unidos, ingenieros de inteligencia artificial en China han hallado maneras de acceder a chips Nvidia prohibidos, diseñados para frenar el avance tecnológico chino en el campo de la inteligencia artificial. Estos métodos han demostrado ser innovadores y efectivamente dentro de los límites legales.
Un enfoque principal ha sido el uso de servidores situados en el extranjero, sin importar físicamente los chips en China. Por ejemplo, Derek Aw, un exminero de Bitcoin, ha jugado un papel crucial al convencer a inversores en EE. UU. y Dubái para financiar servidores con chips Nvidia H100. En junio, su empresa instaló más de 300 servidores en Brisbane, Australia, que comenzaron a procesar algoritmos de IA para una empresa en Pekín tres semanas después.
Otra estrategia empleada ha sido el acceso a servicios en la nube de plataformas como Google, Microsoft y Amazon. Estas compañías no se ven afectadas por las leyes de exportación de EE. UU., permitiendo a empresas chinas alquilar servidores de Nvidia sin restricciones.
Las transacciones frecuentemente se llevan a cabo de manera anónima, utilizando criptomonedas y contratos inteligentes para que compradores y vendedores operen sin revelar sus identidades. La utilización de empresas subsidiarias en lugares como Singapur es una táctica común para ocultar la identidad real de los compradores.
En respuesta a estas maniobras, Nvidia está trabajando en un nuevo chip denominado “B20” en colaboración con Inspur, un socio local en China. Este chip, una versión adaptada de su plataforma de IA Blackwell, cumplirá con las restricciones comerciales de EE. UU. y se espera que esté disponible próximamente.
Desde el punto de vista legal, expertos han señalado que los compradores, vendedores y corredores no infringen ninguna normativa, pues las restricciones vigentes no abarcan el uso de servicios en la nube de EE. UU.
Se anticipa que en octubre, durante la revisión anual de los controles de exportación de semiconductores de EE. UU., el chip H20 de Nvidia sea prohibido para la venta en China. Además, se discuten nuevas regulaciones que podrían restringir aún más la venta de equipos avanzados a China.
El uso de criptomonedas y contratos inteligentes ha facilitado transacciones internacionales anónimas, una práctica que ha revolucionado el mercado de activos digitales y ahora impacta también en la adquisición tecnológica. Esta situación refleja desafíos significativos para las políticas estadounidenses de control de exportación, dado que las empresas chinas continúan encontrando formas alternativas y legales para acceder a tecnología avanzada.