“Joker: Folie à Deux” ha capturado la atención no solo por reunir a Joaquin Phoenix y Lady Gaga en sus papeles protagónicos sino también por haber obtenido una clasificación R de la MPAA. Según el boletín de clasificación, la película cuenta con “violencia fuerte, lenguaje generalizado, algo de sexualidad y desnudez total breve”. Esta clasificación refleja la intensidad y el tono grave que ha caracterizado al personaje del Joker en el cine, manteniendo la línea del film original de 2019, que también fue clasificado con R por razones similares.
La secuela, dirigida por Todd Phillips, continúa explorando el complejo mundo psicológico de Arthur Fleck (Phoenix) y presenta a Lady Gaga en el papel de Harley Quinn, la psiquiatra convertida en cómplice amorosa del Joker. La expectativa crece en torno al desarrollo de sus personajes y la dinámica que compartirán en pantalla. Phillips, cuyo trabajo en la primera entrega del Joker obtuvo aclamación crítica y comercial, busca profundizar en la narrativa oscura que ha revivido el interés por este icónico villano.
Además del regreso de Phoenix y la incorporación de Gaga, “Joker: Folie à Deux” cuenta con un elenco de apoyo impresionante, incluyendo a Zazie Beetz, Catherine Keener y Brendan Gleeson. La película, cuyos detalles de trama se han mantenido en gran medida en secreto, promete una exploración más profunda de la mente del Joker, así como de su influencia corruptora en aquellos que lo rodean, especialmente en Harley Quinn, cuya transformación de psiquiatra a cómplice criminal constituirá probablemente uno de los ejes centrales del film.
Los fanáticos del género están especialmente intrigados por el enfoque musical que se rumorea tendrá la película, algo atípico para una historia de superhéroes, lo que indica un posible viraje hacia una experiencia cinematográfica más experimental y vanguardista. La inclusión de canciones reinterpretadas y la posibilidad de números musicales dotan a “Joker: Folie à Deux” de un carácter único en el panorama actual del cine de superhéroes.