Valve ha confirmado que está trabajando en el soporte de SteamOS para dispositivos portátiles rivales, incluyendo el Asus ROG Ally. Este movimiento podría resultar en que futuros dispositivos similares al Steam Deck operen con el sistema operativo personalizado de Valve en lugar de Windows. A día de hoy, Valve ha vendido varios millones de unidades del Steam Deck.
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Según estimaciones de Omdia, se vendieron casi 20 millones de dispositivos de juegos portátiles globalmente el año pasado. Se proyecta que este número crezca a más de 29 millones anuales para 2028. En este contexto de expansión, se espera el lanzamiento de la Nintendo Switch 2 para 2025 y ya se encuentra disponible un dispositivo portátil de PlayStation de Sony. Además, persisten rumores sobre un posible dispositivo portátil de Xbox.
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Aunque el mercado de dispositivos portátiles es actualmente pequeño, su rápido crecimiento podría llevarlo a reemplazar las consolas de juegos tradicionales entre los jugadores más jóvenes, quienes ya están habituados a jugar en dispositivos móviles. La mayoría de los competidores actuales del Steam Deck funcionan con Windows, pero este sistema operativo no brinda una experiencia óptima en dispositivos portátiles. Esta situación ofrece una oportunidad para que SteamOS se fortalezca como una alternativa viable.
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Microsoft ha mostrado lentitud en responder al éxito del Steam Deck, dejando a Windows en un estado no diseñado específicamente para uso portátil. En respuesta, fabricantes como Lenovo y Asus han desarrollado interfaces propias sobre Windows para mejorar su operatividad en dispositivos portátiles. Sin embargo, estas soluciones resultan limitadas y las mejoras profundas para optimizar Windows en este contexto deben provenir directamente de Microsoft.
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En vista de estos desarrollos, la carrera por dominar el mercado de PC de juegos portátiles se intensifica. La adopción de SteamOS por dispositivos rivales podría reconfigurar el escenario, planteando una mayor competencia para Windows mientras Microsoft trabaja en mejoras específicas para este sector emergente. Además de los dispositivos portátiles, la industria del gaming está viendo una creciente integración con tecnologías de realidad aumentada y virtual, lo que podría revolucionar aún más la experiencia de juego en un futuro cercano.