Tecnología

Google Bajo Fuego: Temen Que Contrato de US$ 1.200 Millones con Israel Facilite Violaciones de Derechos Humanos

La firma de un contrato de US$ 1.200 millones entre Google y el gobierno de Israel ha desatado controversia debido a temores sobre posibles violaciones de derechos humanos en Gaza y Cisjordania. La reciente escalada del conflicto Israel-Hamas y las recomendaciones no implementadas de la Business for Social Responsibility (BSR) han intensificado el escrutinio.

Tecnología

Google Bajo Fuego: Temen Que Contrato de US$ 1.200 Millones con Israel Facilite Violaciones de Derechos Humanos

La firma de un contrato de US$ 1.200 millones entre Google y el gobierno de Israel ha desatado controversia debido a temores sobre posibles violaciones de derechos humanos en Gaza y Cisjordania. La reciente escalada del conflicto Israel-Hamas y las recomendaciones no implementadas de la Business for Social Responsibility (BSR) han intensificado el escrutinio.

“Este contrato ignora deliberadamente las recomendaciones para proteger los derechos humanos y reducir los riesgos legales”

- Señalaron expertos de BSR.

9/12/2024

Google firmó en mayo de 2021 un contrato por US$ 1.200 millones con el gobierno de Israel. De este monto, US$ 525 millones provendrán del Ministerio de Defensa israelí entre 2021 y 2028. El denominado Proyecto Nimbus incluye innovadoras herramientas de inteligencia artificial diseñadas para analizar e identificar objetos en imágenes y videos, junto con servicios de videoconferencia y capacidades avanzadas para almacenar y analizar grandes volúmenes de datos.

A pesar de sus beneficios tecnológicos, este proyecto ha generado una seria controversia. Documentos internos de Google revelaron preocupaciones sobre posibles violaciones de derechos humanos derivadas del uso de estos servicios en la Franja de Gaza y Cisjordania. Los trabajadores de la firma temen que las herramientas de Google Cloud puedan facilitar estas violaciones, lo que ha resultado en importantes debates dentro de la empresa.

Consultores de la firma Business for Social Responsibility (BSR) recomendaron explícitamente que el contrato prohibiera la venta y uso de herramientas de inteligencia artificial al ejército israelí y a otros clientes sensibles. Además, sugirieron realizar una debida diligencia para evitar el mal uso de los servicios y adoptar principios de IA que prohíban la vigilancia y el uso en armamento. Sin embargo, estas recomendaciones no se reflejaron en el contrato final, lo que ha llevado a expertos a señalar una omisión deliberada para proteger los derechos humanos.

Paralelamente, Google también ha expresado preocupaciones sobre posibles conflictos legales. La empresa teme tener que cumplir con órdenes legales internacionales que podrían contradecir este contrato, aumentando los riesgos legales y éticos.

Desde el inicio del conflicto Israel-Hamas, que ha resultado en más de 44,000 muertes en Gaza, el Proyecto Nimbus ha estado bajo mayor escrutinio interno. Aproximadamente 50 empleados de Google han sido despedidos por su participación en protestas en contra de este proyecto, destacando la tensión entre las políticas de la empresa y las convicciones personales de sus trabajadores.

En respuesta a las críticas, Google ha defendido el contrato afirmando que está destinado a cargas de trabajo en su nube comercial y que los ministerios israelíes deben cumplir con sus Términos de Servicio y Política de Uso Aceptable. No obstante, documentos recientes sugieren que el contrato está sujeto a términos de servicio "ajustados", distintos a los términos generales de Google, lo cual ha generado más dudas sobre la transparencia y la implementación efectiva de las regulaciones.

La controversia en torno al Proyecto Nimbus plantea importantes cuestiones sobre la responsabilidad corporativa y la ética en la industria tecnológica, en particular en contextos de conflicto. La falta de implementación de recomendaciones clave para proteger los derechos humanos y la permisividad hacia usos potencialmente perjudiciales de las herramientas de Google podrían repercutir significativamente en la reputación y operación de la empresa en el largo plazo.

Algo Curioso

“Este contrato ignora deliberadamente las recomendaciones para proteger los derechos humanos y reducir los riesgos legales”

- Señalaron expertos de BSR.

Dec 9, 2024
Colglobal News

Google firmó en mayo de 2021 un contrato por US$ 1.200 millones con el gobierno de Israel. De este monto, US$ 525 millones provendrán del Ministerio de Defensa israelí entre 2021 y 2028. El denominado Proyecto Nimbus incluye innovadoras herramientas de inteligencia artificial diseñadas para analizar e identificar objetos en imágenes y videos, junto con servicios de videoconferencia y capacidades avanzadas para almacenar y analizar grandes volúmenes de datos.

A pesar de sus beneficios tecnológicos, este proyecto ha generado una seria controversia. Documentos internos de Google revelaron preocupaciones sobre posibles violaciones de derechos humanos derivadas del uso de estos servicios en la Franja de Gaza y Cisjordania. Los trabajadores de la firma temen que las herramientas de Google Cloud puedan facilitar estas violaciones, lo que ha resultado en importantes debates dentro de la empresa.

Consultores de la firma Business for Social Responsibility (BSR) recomendaron explícitamente que el contrato prohibiera la venta y uso de herramientas de inteligencia artificial al ejército israelí y a otros clientes sensibles. Además, sugirieron realizar una debida diligencia para evitar el mal uso de los servicios y adoptar principios de IA que prohíban la vigilancia y el uso en armamento. Sin embargo, estas recomendaciones no se reflejaron en el contrato final, lo que ha llevado a expertos a señalar una omisión deliberada para proteger los derechos humanos.

Paralelamente, Google también ha expresado preocupaciones sobre posibles conflictos legales. La empresa teme tener que cumplir con órdenes legales internacionales que podrían contradecir este contrato, aumentando los riesgos legales y éticos.

Desde el inicio del conflicto Israel-Hamas, que ha resultado en más de 44,000 muertes en Gaza, el Proyecto Nimbus ha estado bajo mayor escrutinio interno. Aproximadamente 50 empleados de Google han sido despedidos por su participación en protestas en contra de este proyecto, destacando la tensión entre las políticas de la empresa y las convicciones personales de sus trabajadores.

En respuesta a las críticas, Google ha defendido el contrato afirmando que está destinado a cargas de trabajo en su nube comercial y que los ministerios israelíes deben cumplir con sus Términos de Servicio y Política de Uso Aceptable. No obstante, documentos recientes sugieren que el contrato está sujeto a términos de servicio "ajustados", distintos a los términos generales de Google, lo cual ha generado más dudas sobre la transparencia y la implementación efectiva de las regulaciones.

La controversia en torno al Proyecto Nimbus plantea importantes cuestiones sobre la responsabilidad corporativa y la ética en la industria tecnológica, en particular en contextos de conflicto. La falta de implementación de recomendaciones clave para proteger los derechos humanos y la permisividad hacia usos potencialmente perjudiciales de las herramientas de Google podrían repercutir significativamente en la reputación y operación de la empresa en el largo plazo.

Google firmó en mayo de 2021 un contrato por US$ 1.200 millones con el gobierno de Israel. De este monto, US$ 525 millones provendrán del Ministerio de Defensa israelí entre 2021 y 2028. El denominado Proyecto Nimbus incluye innovadoras herramientas de inteligencia artificial diseñadas para analizar e identificar objetos en imágenes y videos, junto con servicios de videoconferencia y capacidades avanzadas para almacenar y analizar grandes volúmenes de datos.

A pesar de sus beneficios tecnológicos, este proyecto ha generado una seria controversia. Documentos internos de Google revelaron preocupaciones sobre posibles violaciones de derechos humanos derivadas del uso de estos servicios en la Franja de Gaza y Cisjordania. Los trabajadores de la firma temen que las herramientas de Google Cloud puedan facilitar estas violaciones, lo que ha resultado en importantes debates dentro de la empresa.

Consultores de la firma Business for Social Responsibility (BSR) recomendaron explícitamente que el contrato prohibiera la venta y uso de herramientas de inteligencia artificial al ejército israelí y a otros clientes sensibles. Además, sugirieron realizar una debida diligencia para evitar el mal uso de los servicios y adoptar principios de IA que prohíban la vigilancia y el uso en armamento. Sin embargo, estas recomendaciones no se reflejaron en el contrato final, lo que ha llevado a expertos a señalar una omisión deliberada para proteger los derechos humanos.

Paralelamente, Google también ha expresado preocupaciones sobre posibles conflictos legales. La empresa teme tener que cumplir con órdenes legales internacionales que podrían contradecir este contrato, aumentando los riesgos legales y éticos.

Desde el inicio del conflicto Israel-Hamas, que ha resultado en más de 44,000 muertes en Gaza, el Proyecto Nimbus ha estado bajo mayor escrutinio interno. Aproximadamente 50 empleados de Google han sido despedidos por su participación en protestas en contra de este proyecto, destacando la tensión entre las políticas de la empresa y las convicciones personales de sus trabajadores.

En respuesta a las críticas, Google ha defendido el contrato afirmando que está destinado a cargas de trabajo en su nube comercial y que los ministerios israelíes deben cumplir con sus Términos de Servicio y Política de Uso Aceptable. No obstante, documentos recientes sugieren que el contrato está sujeto a términos de servicio "ajustados", distintos a los términos generales de Google, lo cual ha generado más dudas sobre la transparencia y la implementación efectiva de las regulaciones.

La controversia en torno al Proyecto Nimbus plantea importantes cuestiones sobre la responsabilidad corporativa y la ética en la industria tecnológica, en particular en contextos de conflicto. La falta de implementación de recomendaciones clave para proteger los derechos humanos y la permisividad hacia usos potencialmente perjudiciales de las herramientas de Google podrían repercutir significativamente en la reputación y operación de la empresa en el largo plazo.

Algo Curioso

PODRÍA INTERESARTE
 

No tienes acceso

Necesitas una membresía para acceder al contenido de este sitio.
Por favor Regístrate o Ingresa