La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elevado su nivel de alarma debido a la expansión del virus de la gripe aviar H5N1 a nuevas especies, incluyendo mamíferos como el ganado bovino y caprino, lo que potencialmente aumenta el riesgo de un salto a humanos. Según Jeremy Farrar, científico jefe de la OMS, aunque hasta ahora no se ha confirmado la transmisión entre humanos, el alto índice de mortalidad observado en casos aislados de infecciones humanas es motivo de gran preocupación.
El brote actual de gripe aviar comenzó en 2020, afectando a decenas de millones de aves de corral, y desde entonces, ha evolucionado para infectar a una variedad más amplia de especies. El reciente descubrimiento de la enfermedad en el ganado lechero en los Estados Unidos marca un desarrollo preocupante dado que estas especies no se consideraban previamente susceptibles a este tipo de influenza.
El caso de un hombre en Texas que se recuperó de la gripe aviar después de estar expuesto a ganado infectado destaca el potencial de transmisión a humanos a través del contacto con mamíferos infectados. Este fue uno de los primeros casos conocidos de infección humana a través del contacto con un mamífero infectado con el virus H5N1, subrayando la adaptabilidad y el peligro potencial del virus.
Ante esta situación, Farrar ha hecho un llamado para aumentar la vigilancia y el monitoreo de las infecciones humanas, enfatizando la importancia de entender cómo y cuándo ocurren las adaptaciones del virus, lo cual es clave para prevenir una pandemia.