El estudio, publicado en BMJ Global Health, analizó tendencias históricas de cuatro tipos de enfermedades virales: Filovirus (como el virus del Ébola y Marburg), SARS Coronavirus-1, virus Nipah y virus Machupo. Los investigadores examinaron más de 3,150 brotes entre 1963 y 2019, identificando 75 eventos de transmisión zoonótica en 24 países que resultaron en 17,232 muertes, la mayoría en África y causadas por filovirus.
Los hallazgos revelan un aumento anual del 5% en el número de epidemias y un incremento del 9% en las muertes desde 1963 hasta 2019. Si estas tasas de aumento continúan, se espera que los patógenos analizados causen cuatro veces más eventos de transmisión y 12 veces más muertes en 2050 en comparación con 2020. Estas cifras podrían ser subestimaciones, ya que no incluyen la COVID-19.
El cambio climático y la deforestación son factores clave en este aumento, ya que intensifican el contacto entre humanos y animales, elevando el riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas. La investigación destaca la necesidad de acciones urgentes para abordar este creciente riesgo para la salud global, sugiriendo que los eventos recientes no son aberraciones, sino parte de una tendencia de varias décadas en la que las epidemias impulsadas por zoonosis se han vuelto más grandes y frecuentes.