Un avión de carga de DHL se estrelló cerca del Aeropuerto de Vilna, en Lituania, la mañana del lunes, lo que resultó en la muerte de un tripulante y en la hospitalización de tres más. El accidente ocurrió aproximadamente a las 5:30 a.m., cuando el avión, un Boeing 737, había partido de Leipzig, Alemania. Al momento del impacto, el avión se incendió, provocando un fuego en una casa residencial cercana. Afortunadamente, no hubo víctimas entre los residentes de la casa, aunque la estructura sufrió algunos daños.
El sitio del accidente, ubicado a unos 1,5 kilómetros del aeropuerto, mostró los restos del avión esparcidos sobre un área amplia, incluyendo partes del revestimiento amarillo característico de la aeronave y paquetes de carga esparcidos sobre el suelo nevado. Los servicios de emergencia llegaron rápidamente, y tres miembros de la tripulación—dos españoles y un alemán—fueron rescatados de los escombros y trasladados al hospital. El cuarto tripulante, un ciudadano español, fue encontrado muerto en el lugar.

Las autoridades lituanas informaron que el avión era operado por Swiftair, un contratista con sede en Madrid que trabaja para DHL. Una cámara de seguridad captó el momento en que el avión descendía antes de desaparecer detrás de unos almacenes, seguido por una explosión. Testigos afirmaron haber visto una bola de fuego tras el impacto, con una columna de humo negro elevándose hacia el cielo.

Las autoridades lituanas han iniciado una investigación sobre las causas del accidente, aunque hasta el momento no se ha confirmado la presencia de factores externos, como el sabotaje. El jefe de inteligencia de Lituania, Darius Jauniškis, reconoció que se podría considerar la posible implicación de Rusia en incidentes similares, pero subrayó que no hay pruebas que respalden esta hipótesis.
El Boeing 737, que tenía 31 años, estaba en su aproximación al Aeropuerto de Vilna cuando realizó un giro brusco hacia el norte antes de estrellarse a poco más de 1 kilómetro de la pista. Las condiciones meteorológicas al momento del accidente incluían temperaturas bajo cero, cielo parcialmente nublado y vientos de aproximadamente 30 km/h.
El Ministerio de Transporte de Alemania ha enviado expertos de la Oficina Federal de Investigación de Accidentes Aéreos para asistir en la investigación. La causa del accidente aún es desconocida, y las autoridades lituanas han pedido cautela y evitar especulaciones. La primera ministra, Ingrida Šimonytė, destacó la importancia de permitir que los investigadores lleven a cabo un examen exhaustivo para esclarecer la verdad detrás del incidente.