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El repunte de Bitcoin a más de $60,000 marca un hito significativo para la criptomoneda más grande del mundo, que se recupera masivamente. Este aumento representa un cambio dramático en comparación con el año anterior, cuando el precio había caído a alrededor de $16,000 en medio de varios escándalos en la industria. La aprobación de los primeros ETFs de Bitcoin al contado en EE. UU. en enero trajo consigo miles de millones de dólares en inversión institucional al mercado por primera vez, contribuyendo significativamente a este repunte.
El interés renovado y la inversión en Bitcoin y otras criptomonedas han sido impulsados en parte por la aprobación de una serie de ETFs de Bitcoin por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. en enero. Este movimiento ha atraído a nombres importantes de las finanzas tradicionales, como BlackRock y Fidelity, al espacio de Bitcoin. Solo el martes, el ETF de Bitcoin iShares de Blackrock atrajo $520 millones en nuevos flujos de inversión, en parte gracias a que muchas filiales de la compañía ofrecieron la criptomoneda a sus clientes por primera vez.
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La anticipación del evento de halving de Bitcoin, que se espera ocurra alrededor del 19 de abril de este año, también ha jugado un papel crucial en el aumento de la demanda. Este evento, que reduce a la mitad la recompensa por minar Bitcoin, ha sido históricamente un catalizador para corridas alcistas en el precio de Bitcoin. La combinación de la entrada de inversión institucional y la reducción de la oferta debido al halving ha creado un entorno propicio para el aumento de precios.
A medida que Bitcoin se acerca a su máximo histórico de más de $68,000, el mercado en general muestra signos de un optimismo renovado. Este repunte no solo ha beneficiado a Bitcoin, sino que también ha visto aumentos significativos en otras criptomonedas importantes, como Ethereum, que ha registrado nuevos máximos para 2024. La recuperación de Bitcoin coincide con un creciente impulso hacia una política monetaria más laxa y ganancias simultáneas en el mercado de valores, lo que sugiere un cambio de tendencia en la percepción de las criptomonedas como una inversión viable a largo plazo.
