El 6 de marzo de 2025, durante las maniobras de fuego real del ejercicio militar conjunto "Freedom Shield", realizadas entre Corea del Sur y Estados Unidos, un error en la introducción de coordenadas llevó al bombardeo accidental de una zona civil en el pueblo de Nogok-ri, perteneciente a la ciudad de Pocheon, a unos 25 kilómetros de la frontera con Corea del Norte. El hecho ocurrió a las 10:04 a.m., cuando dos aviones de combate surcoreanos KF-16 descargaron ocho bombas MK-82, cada una con un peso aproximado de 225 kilogramos.

El incidente resultó en al menos 15 personas heridas, entre ellas seis civiles y dos soldados. De los civiles, cuatro se encuentran gravemente lesionados, destacando entre ellos dos extranjeros: uno proveniente de Tailandia y otro de Myanmar. Las autoridades confirmaron que, a pesar de la gravedad de las heridas, no existía peligro inminente para la vida de los afectados.

En lo que respecta a daños materiales, las explosiones dejaron una huella significativa. Tres casas particulares, una iglesia católica y un invernadero sufrieron destrozos considerables, incluyendo el colapso de techos y ventanas destruidas. Los cráteres generados por las bombas alcanzaron dimensiones de hasta ocho metros de diámetro y 2.4 metros de profundidad, incrementando la alarma entre los vecinos del área.

La causa principal del error fue atribuida a la introducción incorrecta de coordenadas por parte de uno de los pilotos antes de despegar. Esto ocasionó que las bombas cayeran a unos ocho kilómetros de distancia del área designada para los ejercicios.

En respuesta a la situación, la Fuerza Aérea de Corea del Sur realizó una disculpa pública, expresando su solidaridad con los afectados y sus familias, al tiempo que se comprometió a la creación de un comité de respuesta para investigar el incidente y evaluar los daños. Las maniobras de fuego real en todo el país fueron suspendidas temporalmente mientras se determina las causas exactas y las medidas necesarias para prevenir incidentes similares.

Por su parte, el alcalde de Pocheon, Paek Young Hyeun, solicitó la suspensión total de los ejercicios militares en la región hasta que se implementen medidas de seguridad confiables. Su declaración enfatizó la gravedad del accidente al calificarlo como “horrible” e inaceptable.

El ejercicio "Freedom Shield", bajo el cual ocurrió este percance, es parte de los esfuerzos regulares entre Corea del Sur y Estados Unidos para fortalecer la preparación ante posibles amenazas en la península coreana, particularmente frente a la tensión con Corea del Norte. Sin embargo, este incidente ha provocado cuestionamientos acerca de los riesgos asociados con este tipo de maniobras militares en áreas cercanas a comunidades residenciales.

Las bombas MK-82 involucradas en el incidente, diseñadas principalmente para uso militar en ataques de precisión, son las mismas que se han utilizado desde la Guerra de Vietnam y tienen un impacto destructivo significativo en un radio considerable.