Juan David Echavarría, conocido como ‘Chucky’, fue capturado en Playa Rica, sector de Bello donde ocurrió el ataque y asesinato de Sara Millerey, mujer trans de 32 años. La víctima fue hallada en una quebrada, donde, de acuerdo con la investigación, fue arrojada tras el ataque y se ahogó. Echavarría enfrenta cargos por tortura, homicidio agravado y tráfico de estupefacientes, según detalló el ministro de Defensa, Pedro Sánchez. Tras la detención, Echavarría fue puesto a disposición de la Fiscalía.
La detención de ‘Chucky’ ocurre tras 50 días de investigación y representa la segunda captura relevante en el proceso judicial que siguen las autoridades por este caso. La primera se realizó a finales de abril, cuando fue apresado Juan Camilo Muñoz, alias ‘Teta’, quien también pertenece a la banda criminal El Mesa. Este grupo opera en el oriente de Antioquia y es responsable del tráfico y distribución de drogas en la zona.
El asesinato de Millerey, cuyo móvil aún no ha sido esclarecido, está vinculado a presuntas disputas de control territorial entre organizaciones criminales de la región, especialmente El Mesa, que ha incrementado su poder en el Valle de Aburrá, área metropolitana que comprende Bello y Medellín y que suma más de 4 millones de habitantes.
El Mesa ha experimentado una expansión ligada a una escalada de violencia, con registros de homicidios en Rionegro —municipio clave que alberga el aeropuerto internacional José María Córdova— pasando de 18 en 2021 a 35 en 2022 y 38 en 2023. En su crecimiento, la organización ha formado alianzas con el frente 36 de las disidencias de las FARC y el ELN, y ha sostenido conflictos con el Clan del Golfo.
La estructura criminal es liderada por Gustavo Adolfo Pérez Peña, alias El Montañero, quien fue excarcelado en marzo del año pasado y participa como gestor de paz en las conversaciones promovidas por el actual Gobierno bajo la política de paz total.
El caso de Sara Millerey ha provocado amplias reacciones en Colombia y una alerta sobre los elevados riesgos a los que se enfrentan las personas trans en el país, así como sobre la persistencia de la violencia de género en la región. Actualmente, las autoridades continúan tras la pista del tercer sospechoso implicado en el crimen.