Elon Musk, el visionario empresario y director ejecutivo de la red social X, ha realizado una visita significativa a Israel, marcada por su encuentro con el primer ministro Benjamín Netanyahu. Esta visita se produce en un contexto de tensiones en la región de Gaza y en medio de acusaciones de antisemitismo dirigidas a Musk, las cuales busca disipar a través de su diálogo con líderes políticos israelíes. En su conversación con Netanyahu, Musk enfatizó la postura de Israel en el conflicto, señalando que “Israel trata de evitar la muerte de civiles” en Gaza, reconociendo la complejidad de la situación.
Durante su estancia, Musk visitó Kfar Aza, una de las comunidades afectadas por ataques de Hamás. Allí, expresó su condena hacia los actos de los militantes palestinos y criticó la “propaganda” que alimenta tales actos violentos. Además, el presidente israelí, Isaac Herzog, destacó el papel crucial de la red social X en la lucha contra el antisemitismo, instando a Musk a tomar un papel activo en este frente.
Netanyahu, por su parte, hizo una comparación entre Hamás y los nazis, describiéndolos como “monstruos” que atacan a civiles. En su diálogo con Musk, el primer ministro subrayó la necesidad de “desradicalizar Gaza”, mencionando que esto requerirá esfuerzos en las mezquitas y escuelas para cambiar la narrativa y educación de los niños. Musk coincidió en la importancia de ayudar a la población de Gaza, más allá de la lucha contra Hamás.
La visita también incluyó un acuerdo para el uso del sistema satelital Starlink de SpaceX en Israel y Gaza, siempre bajo la supervisión de las autoridades israelíes. Este acuerdo, anunciado por el ministro de Comunicaciones de Israel, Shlomo Karhi, es visto como una herramienta potencial en la lucha contra Hamás. Musk, consciente de la controversia que lo rodea, ha prometido donar los beneficios obtenidos a través de anunciantes o suscriptores relacionados con la guerra de Gaza a hospitales israelíes y a organizaciones humanitarias en Gaza.