En una reunión de alto nivel celebrada el 28 de julio de 2024 en Tokio, el Secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, reveló una reestructuración sustancial del comando militar estadounidense en Japón. Este cambio transformará las Fuerzas de EE. UU. en Japón (USFJ) en un Cuartel General Conjunto, el ajuste más significativo en los 70 años de historia del USFJ.
El nuevo comando tendrá un rol de liderazgo directo, responsabilizándose tanto de la planificación operativa en tiempos de paz como en crisis. A diferencia de la solicitud japonesa de contar con un general de cuatro estrellas al mando, el Cuartel General será encabezado por un general de tres estrellas. Se anticipa que esta nueva estructura esté completamente operativa para marzo de 2025.
Este movimiento se contextualiza en un escenario de crecientes desafíos geopolíticos, incluyendo la asertividad de China y las amenazas nucleares de Corea del Norte. En este marco, Japón ha comenzado a distanciarse de su histórica postura pacifista posterior a la Segunda Guerra Mundial, con planes para duplicar su gasto en defensa al 2% de su PIB para 2027.
_11zon.webp)
Durante la reunión en Tokio, por primera vez se discutió el concepto de "disuasión extendida," reflejando el compromiso de EE. UU. de emplear su arsenal nuclear para proteger a Japón. Además, se firmó un acuerdo trilateral entre EE. UU., Japón y Corea del Sur para mejorar la cooperación, incluyendo el intercambio en tiempo real de datos sobre misiles norcoreanos.
Actualmente, Japón alberga a 54,000 tropas estadounidenses, cientos de aeronaves, y el único grupo de portaaviones de EE. UU. desplegado en el extranjero. Dentro de este contexto, Lloyd Austin y el Secretario de Estado, Antony Blinken, reafirmaron que los compromisos de seguridad de EE. UU. hacia Japón permanecerán inalterados, independientemente de los resultados de futuras elecciones estadounidenses, mitigando así las preocupaciones relativas al interés de Donald Trump en la alianza.
Tras las conversaciones en Tokio, Blinken y Austin se dirigirán a Filipinas para mantener reuniones con funcionarios y abordar la seguridad regional, en un esfuerzo concertado para contrarrestar la creciente influencia de China en la región del Indo-Pacífico.
.webp)








