La Corte Suprema de Justicia ha emitido una condena histórica contra Luis Alberto Monsalvo Gnecco, exgobernador del Cesar, por su implicación en actos de corrupción relacionados con el Programa de Alimentación Escolar (PAE). Esta decisión subraya la gravedad de los delitos cometidos durante su administración, que incluyen contrato sin cumplimiento de requisitos legales y peculado por apropiación, afectando directamente a los más vulnerables: los niños y adolescentes del departamento.
Durante su mandato en 2015, Monsalvo Gnecco firmó un contrato plagado de irregularidades, que resultó en sobrecostos millonarios, específicamente, un excedente de 3.000 millones de pesos (aproximadamente un millón de dólares de la época). Este contrato favoreció a un consorcio cercano a su círculo, demostrando un claro direccionamiento del proceso y una violación de la confianza pública.
El escándalo del PAE no solo revela la corrupción sistémica dentro de la administración de Monsalvo Gnecco sino también el impacto devastador de estas acciones en la seguridad alimentaria de los estudiantes del Cesar. En un departamento donde el hambre y la inseguridad alimentaria afectan a una gran parte de la población, los actos corruptos exacerbaron las condiciones de vida ya precarias de muchos.
La condena de Monsalvo Gnecco es un paso crucial en la lucha contra la corrupción en Colombia, enviando un mensaje fuerte de que los actos de corrupción, especialmente aquellos que perjudican a los sectores más vulnerables de la sociedad, no quedarán impunes. La expectativa ahora se centra en la sentencia que se conocerá en una próxima audiencia, la cual determinará los años de prisión que el exgobernador deberá enfrentar.