Durante una entrevista con el Financial Times, Bill Gates criticó abiertamente a Elon Musk al señalarlo como principal impulsor de los recortes presupuestarios destinados a USAID, actualmente dirigidos por el Departamento de Eficiencia del Gobierno de Estados Unidos (DOGE), encabezado por Musk. Según Gates, dichos recortes alcanzan un 80%, cifra que supera ampliamente el recorte del 20% que él inicialmente había anticipado.
Este ajuste presupuestario ha paralizado numerosos programas de ayuda internacional y, de acuerdo con las proyecciones presentadas por Gates, traería como consecuencia un aumento de la mortalidad infantil a nivel mundial, pasando de aproximadamente cinco millones de muertes anuales a una cifra estimada de seis millones en los próximos años. Gates señaló que, antes de los recortes, se esperaba que la tendencia fuera descendente, alcanzando cuatro millones de muertes infantiles anuales.
Además, Gates expresó su preocupación por el posible resurgimiento de enfermedades transmisibles como el sarampión, el VIH y la poliomielitis, argumentando que el cierre virtual de USAID tendrá un impacto devastador sobre la salud pública global, dado que muchos programas de vacunación y prevención han quedado suspendidos.
En la misma entrevista, Gates anunció su compromiso de donar 200 mil millones de dólares a la Fundación Gates antes de su cierre definitivo previsto para el 31 de diciembre de 2045, con el objetivo de mitigar problemas relacionados con la pobreza y la salud en el mundo. Gates defendió a los trabajadores de USAID ante los calificativos de “lunáticos radicales” y “antiamericanos” emitidos previamente por Musk, describiéndolos como “héroes fundamentales para la salud global”.
La administración Trump ha respaldado el proceso de desmantelamiento de USAID y la suspensión de sus programas de asistencia exterior, generando inquietud entre organizaciones no gubernamentales sobre el impacto de estos recortes. Un portavoz de Elon Musk declaró que su gestión en el DOGE busca eliminar el desperdicio y el abuso en el gobierno, aunque hasta el momento Musk no ha respondido de manera directa a las acusaciones de Gates.
Gates urgió a revertir estos recortes al enfatizar el riesgo inminente para millones de vidas, mientras el debate sobre la eficiencia y la prioridad de la asistencia extranjera sigue abierto en el actual contexto político estadounidense.