El Gobierno de Colombia ha formalizado la prórroga del cese al fuego con tres grupos disidentes de la extinta guerrilla de las FARC, que forman parte del Estado Mayor Central (EMC). La extensión se prolongará por seis meses, desde la medianoche del 16 de octubre de 2024 hasta las cero horas del 15 de abril de 2025. Los grupos implicados son los bloques Magdalena Medio Comandante Gentil Duarte y Comandante Jorge Suárez Briceño, así como el frente Raúl Reyes, todos ellos liderados por Alexánder Mendoza, conocido como alias Calarcá Córdoba.
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Estos grupos están verificados que operan específicamente en 16 estructuras que se encuentran desplegadas en los departamentos de Bolívar, Putumayo, Antioquia, Cundinamarca, Meta, Huila y Caquetá. El decreto de prórroga fue firmado por el presidente Gustavo Petro y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, consolidando como oficial esta determinación del gobierno.
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El cese al fuego original comenzó el 16 de octubre de 2016 y ha sido prorrogado repetidamente. La última extensión fue hasta el 15 de julio de 2024, pero tuvo una suspensión parcial en marzo debido a ataques liderados por estructuras de Ivan Mordisco en Cauca. Esta suspensión terminó el 16 de julio de 2024, cuando el gobierno concluyó el cese al fuego con las facciones bajo el mando de Mordisco, evidenciando una ruptura en el EMC.
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A pesar de este conflicto interno, el Gobierno optó por continuar el cese al fuego con los grupos leales a Calarcá Córdoba. En paralelo, las fuerzas militares han intensificado sus operaciones contra las facciones de Mordisco. Una de estas fue la operación Perseo, lanzada recientemente con la finalidad de recuperar el control de El Plateado, un pueblo estratégico en Cauca dominado por el EMC. En respuesta, insurgentes de Mordisco emprendieron un ataque con drones y amenazaron con agredir la cumbre mundial de biodiversidad, conocida como COP16, que se celebrará en Cali a partir del 21 de octubre de 2024.
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El Gobierno colombiano ha asegurado que la seguridad del evento COP16 estará garantizada, disminuyendo los temores sobre posibles conflictos durante esta importante cumbre global. La dualidad en las estrategias del Gobierno, que combina diálogos con ofensivas militares selectivas, refleja los desafíos actuales en lograr una paz sostenible en el país.