El fondo inaugural de Donald Trump, quien asumirá la presidencia el 20 de enero de 2025, ha recibido contribuciones significativas de empresas tecnológicas y grandes corporaciones. Google y Microsoft, empresas que han mantenido una relación compleja con Trump en el pasado, han decidido donar $1 millón cada una al fondo, siguiendo la tendencia de otras grandes entidades como Amazon, Meta, OpenAI, Uber y Boeing.
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Karan Bhatia, jefe global de asuntos gubernamentales y políticas públicas de Google, confirmó la donación y anunció que Google transmitirá la ceremonia en vivo a través de YouTube, con un enlace directo en su página de inicio. Google, con una historia de donaciones a fondos inaugurales y transmisiones de eventos previos, se muestra consistente en su apoyo a las ceremonias presidenciales.
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Por su parte, un portavoz de Microsoft destacó que, además de la donación de $1 millón para esta inauguración, la empresa donó $500,000 en las inauguraciones de Trump en 2017 y de Joe Biden en 2021, subrayando su compromiso bipartidista.
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El comité inaugural de Trump ha alcanzado un récord de $170 millones en recaudación, una cifra notablemente superior a los $63 millones recaudados para la inauguración de Biden en 2021 y los $53 millones y $42 millones obtenidos para las inauguraciones de Obama en 2009 y 2013, respectivamente. Estas cifras demuestran el creciente interés y las estrategias de las empresas para alinear sus intereses con la administración entrante.
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Amazon, Meta, OpenAI, Uber y Boeing han demostrado un apoyo considerable, cada una contribuyendo con $1 millón. Además, Boeing es otra empresa significativa que ha confirmado una donación del mismo monto. Mientras tanto, Chevron ha confirmado su participación, aunque sin especificar la cifra exacta.
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A pesar de la compleja relación que ha existido entre Trump y las grandes empresas tecnológicas, caracterizada por acusaciones de sesgo y supresión de contenido, la reciente victoria electoral ha marcado un cambio en la dinámica. Las donaciones recientes se comprenden como una estrategia para mejorar las relaciones con la administración entrante y evitar futuros desafíos regulatorios.
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Es importante señalar que, a diferencia de las contribuciones directas a las campañas electorales, las donaciones a los comités inaugurales no tienen límites, lo que permite a las empresas realizar aportes sustanciales sin restricciones legales.
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En resumen, las donaciones realizadas por Google, Microsoft y otras grandes corporaciones subrayan el esfuerzo conjunto del sector tecnológico y empresarial por establecer relaciones favorables con la administración de Trump, en un contexto donde han enfrentado críticas y desafíos en los últimos años. Las donaciones a comités inaugurales no tienen límites, lo que contrasta con las estrictas regulaciones que rigen las contribuciones directas a campañas electorales, permitiendo así a las empresas ofrecer sumas considerables.