Iris Marín Ortiz fue seleccionada como defensora del Pueblo de Colombia el 16 de agosto de 2024, obteniendo 170 de los 186 votos disponibles en la plenaria de la Cámara de Representantes. Este hito histórico la convierte en la primera mujer en liderar la Defensoría del Pueblo desde su creación en 1992. Sus competidores, Jomary Ortegón y Dora Lucy Arias, recibieron 10 y 6 votos, respectivamente.
Marín Ortiz posee una sólida trayectoria en el campo jurídico, destacándose como exmagistrada auxiliar de la Corte Constitucional. Ha trabajado en el despacho de la magistrada Natalia Ángel Cabo, donde ha acumulado una vasta experiencia en temas de derechos humanos y constitucionalidad. Su candidatura recibió el respaldo de una amplia gama de partidos políticos, incluyendo el Liberal, Conservador, 'la U', Alianza Verde, Comunes, las curules de paz, y representantes del Pacto Histórico.
El mandato de Marín Ortiz comenzará el 1 de septiembre de 2024 y se prolongará hasta el 31 de agosto de 2028. Durante este periodo, se espera que impulse políticas y programas destinados a fortalecer la protección y promoción de los derechos humanos en Colombia.
La Defensoría del Pueblo, creada en 1992, es una institución clave en la defensa de los derechos humanos en el país. La elección de Marín Ortiz no solo es un avance significativo en términos de equidad de género, sino también una oportunidad para reforzar el compromiso institucional con la protección de los derechos de todos los colombianos. La elección de una mujer para este cargo es un reflejo de los cambios y avances en la sociedad colombiana, y se anticipa que su liderazgo traerá consigo nuevas perspectivas y enfoques para enfrentar los desafíos en materia de derechos humanos.
En su discurso de aceptación, Marín Ortiz subrayó la importancia de este logro para las mujeres y para todas las personas que luchan por la justicia y la equidad en Colombia. "Nuestra candidatura representa un nuevo capítulo en la historia de los derechos humanos en Colombia", afirmó, destacando su compromiso con una gestión inclusiva y orientada a la transformación positiva del país.
La Defensoría del Pueblo tiene un papel fundamental en la defensa de los derechos humanos, la supervisión de las condiciones carcelarias, la protección de los derechos de las minorías y la promoción de la paz. Con Marín Ortiz al frente, se espera una continuidad y fortalecimiento de estas labores, con un enfoque especial en la defensa de los derechos de las mujeres y otros grupos vulnerables. Iris Marín Ortiz se une a un selecto grupo de mujeres que han alcanzado cargos de alta relevancia en Colombia, en un país donde las mujeres han luchado durante décadas por la igualdad de género en todos los sectores de la sociedad.