El Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur (NIS) ha confirmado recientemente que Kim Ju Ae, hija de 12 años del actual líder norcoreano Kim Jong Un, está siendo preparada como posible sucesora del liderazgo de Corea del Norte. La información fue compartida durante una reunión con legisladores surcoreanos el 29 de julio de 2024, y se sustenta en múltiples apariciones públicas de la joven junto a su padre.
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Desde noviembre de 2022, Kim Ju Ae ha realizado 29 apariciones públicas, destacándose especialmente en eventos de gran significancia. En 2024, ha participado en siete eventos públicos, siendo el más reciente en mayo, cuando acompañó a su padre en la inauguración de una nueva calle en Pyongyang. Estas apariciones han alimentado las especulaciones sobre su rol en la línea de sucesión.
El legislador Lee Seong-kweun informó que la niña está inmersa en un proceso de entrenamiento intensivo desde 2022, lo que subraya la seriedad con la que el régimen norcoreano se está tomando su preparación.
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La salud de Kim Jong Un, quien tiene 40 años, es un factor crítico en este contexto. Con un peso aproximado de 140 kg y un índice de masa corporal (IMC) de 45, se encuentra muy por encima del rango saludable. Además, desde sus 30 años, ha mostrado síntomas de hipertensión y diabetes, poniéndolo en alto riesgo de enfermedades cardiovasculares. Este deterioro ha incrementado las especulaciones sobre la necesidad de preparar un sucesor a corto plazo.
En marzo de 2024, la prensa estatal norcoreana se refirió a Kim Ju Ae como "gran persona de guía" (hyangdo), un término históricamente asociado a líderes y sus sucesores en el país, sugiriendo que su posición es más que simbólica. Sin embargo, el régimen de Pyongyang ha ajustado estratégicamente la frecuencia de sus apariciones públicas para observar las reacciones del pueblo norcoreano.
La posibilidad de que otros hermanos de Kim Ju Ae también puedan ser considerados como posibles sucesores no ha sido descartada. Sin un anuncio oficial que clarifique la sucesión, el NIS mantiene abierta la opción de que otros miembros de la familia puedan surgir como alternativas.
La información proporcionada por el NIS a través de legisladores surcoreanos refleja la situación actual y valida la naturaleza altamente controlada de la dinámica de sucesión en Corea del Norte.