La Princesa Märtha Louise de Noruega, de 52 años, y el chamán estadounidense Durek Verrett, de 49 años, se casaron el 31 de agosto de 2024 en una ceremonia celebrada en Geiranger, un popular destino turístico en la costa oeste de Noruega. La boda tuvo lugar en una gran carpa blanca instalada en un césped exuberante, y fue parte de una celebración de tres días que comenzó el 29 de agosto.
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La ceremonia fue presenciada por alrededor de 350 invitados, entre ellos miembros de la familia real noruega, incluidos el rey Harald, la reina Sonja, el príncipe heredero Haakon y la princesa Mette-Marit. Los eventos previos al enlace incluyeron una fiesta de bienvenida con un código de vestimenta "sexy y cool" en el Hotel 1904, un paseo en barco por el fiordo de Geiranger, y una fiesta de salsa con temática latinoamericana la noche anterior a la celebración matrimonial. Durante la ceremonia, se presentaron artistas noruegos y estadounidenses, un coro gospel y un cantante que representó a los pueblos indígenas Sámi de Noruega.
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La pareja decidió vender los derechos de las fotos de la boda a la revista británica *Hello!* y los derechos de filmación a Netflix, lo que ha generado críticas en Noruega sobre la comercialización de su estatus real. A pesar de que la princesa ha renunciado a sus deberes oficiales y a usar su título para fines comerciales, se ha visto envuelta en controversias, como el lanzamiento de una marca de ginebra que utilizaba su título real.
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Märtha Louise y Durek Verrett se conocieron en 2018 a través de amigos en común y anunciaron su compromiso en junio de 2022. La propuesta de matrimonio tuvo lugar en una finca ecuestre en California, donde Durek le entregó un anillo de compromiso con una esmeralda y tres diamantes a cada lado, en honor a sus tres hijas de su matrimonio anterior.
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La Princesa Märtha Louise es la única hija del rey Harald y la reina Sonja, y ocupa el cuarto lugar en la línea de sucesión al trono noruego. De su matrimonio anterior con el fallecido autor Ari Behn, del cual se divorció en 2017, tiene tres hijos. Durek Verrett, por su parte, no recibirá un título real ni tendrá deberes oficiales tras la boda.
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La pareja ha enfrentado críticas por sus creencias alternativas y su enfoque en la comercialización de su imagen. A pesar de las controversias, la ceremonia fue descrita como una fusión de Hollywood y Geiranger, llena de amor y celebraciones. La celebración matrimonial incluyó un paseo en barco por el fiordo de Geiranger, un lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.