Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, presentó el 4 de marzo de 2025 el plan "ReArm Europe", un paquete que podría movilizar hasta 800 mil millones de euros (841 mil millones de dólares) con el objetivo de aumentar significativamente la capacidad defensiva de la Unión Europea. Este plan también tiene como objetivo proporcionar apoyo militar inmediato a Ucrania tras la reciente suspensión de la ayuda militar por parte de Estados Unidos.
El plan incluye varias iniciativas clave. En primer lugar, contempla un instrumento financiero para ofrecer préstamos por un total de 150 mil millones de euros a los Estados miembros, destinados a financiar inversiones conjuntas en sistemas de defensa pan-europeos, como sistemas de defensa aérea, misiles, artillería, drones y tecnologías anti-drones. Además, von der Leyen señaló que un aumento promedio del 1.5% del PIB en el gasto en defensa de los Estados miembros podría liberar un espacio fiscal adicional de 650 mil millones de euros en los próximos cuatro años.
Se propone también flexibilizar las reglas fiscales del Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la Unión Europea. A través de la activación de la cláusula de escape nacional, los Estados miembros podrían excluir el gasto en defensa de sus compromisos fiscales, que actualmente limitan el déficit presupuestario al 3% del PIB y la deuda pública al 60%.
La presentación del plan ocurre en un contexto en el que Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, ha suspendido la ayuda militar a Ucrania, lo que ejerce presión sobre Europa para que asuma un papel más relevante en la seguridad regional. En la misma línea, von der Leyen destacó la necesidad de actuar con celeridad y responsabilidad para no solo atender las necesidades inmediatas de seguridad, sino también preparar a Europa para desempeñar una función más estratégica en su defensa a largo plazo.
Una cumbre extraordinaria se celebrará en Bruselas para discutir las propuestas, señal de la urgencia con que los líderes de la UE buscan abordar la situación en Ucrania y reforzar la seguridad colectiva. Sin embargo, la implementación de este plan enfrenta desafíos importantes. Mientras algunos Estados miembros, como Polonia, ya han elevado significativamente su gasto en defensa hasta niveles del 4.12% del PIB, otros, como España, destinan solo el 1.12%, lo que expone divisiones notables dentro del bloque. Adicionalmente, líderes como Viktor Orban de Hungría y Robert Fico de Eslovaquia han expresado su intención de vetar cualquier medida que aumente la asistencia militar a Ucrania.
"ReArm Europe" representa uno de los paquetes de defensa más significativos anunciados en la historia de la Unión Europea. Más allá de sus objetivos inmediatos, este ambicioso plan tiene como intención establecer las bases para que Europa reduzca su dependencia en aliados externos, como Estados Unidos, y fortalezca su autonomía estratégica en un contexto global cada vez más incierto.
El gasto en defensa de Polonia, que alcanza el 4.12% de su PIB, es el más alto entre los Estados miembros de la Unión Europea, superando incluso a economías más grandes como Alemania y Francia.