El debate sobre la posible reinstauración del servicio militar obligatorio en Estados Unidos ha cobrado fuerza en el escenario político actual. La propuesta, respaldada por figuras prominentes como el senador de Ohio JD Vance y el senador Lindsey Graham, se presenta en un contexto de preocupaciones crecientes sobre la soledad y la alienación entre los jóvenes, agravadas por la pandemia de COVID-19. Vance, candidato a la vicepresidencia, aboga por un servicio nacional obligatorio, argumentando que esta medida proporcionaría a los jóvenes "algo en juego" en la sociedad.
Por su parte, Lindsey Graham ha destacado que el servicio militar obligatorio podría ser una solución viable a la escasez de reclutas en el ejército, un problema persistente durante los últimos años. En 2023, el cirujano general de EE. UU., emitió un informe detallando una "epidemia de soledad y aislamiento", lo cual añade relevancia a la propuesta de los políticos.
Internacionalmente, iniciativas similares están siendo consideradas. En el Reino Unido, el primer ministro Rishi Sunak ha propuesto un esquema de servicio nacional que obligaría a los jóvenes de 18 años a elegir entre un año de servicio militar o 25 días de servicio comunitario. En Alemania, el ministro de Defensa, Boris Pistorius, introdujo un cuestionario obligatorio para evaluar la disposición y aptitud de los jóvenes de 18 años para el servicio militar, aunque sin llegar a hacerlo obligatorio.
A pesar del apoyo que han recibido estas propuestas, también enfrentan críticas significativas. Activistas como Cindy Sheehan han expresado su oposición, argumentando que el recrutamiento militar en las escuelas secundarias ya es suficiente y que los jóvenes deberían centrarse en su educación y futuro en lugar de ser presionados por reclutadores militares. También se sugiere que estas propuestas son una manera de revivir el reclutamiento militar, que ha sido completamente voluntario desde 1973.
El ejército de Estados Unidos ha enfrentado dificultades de reclutamiento, y no ha activado un reclutamiento en más de 50 años. Sin embargo, el Congreso está considerando propuestas para actualizar el sistema de reclutamiento, lo que añade otro nivel de complejidad al debate.
Además del servicio militar obligatorio, se proponen alternativas como un "Cuerpo de Ciudadanos", que permitiría a los jóvenes trabajar en sus comunidades en lugar de ser reclutados militarmente. Estas alternativas buscan ofrecer soluciones menos coercitivas mientras se mantiene el objetivo de aliviar la soledad y la alienación entre los jóvenes.
El resurgimiento de la discusión sobre el servicio militar obligatorio refleja un intento de abordar varias preocupaciones sociales y de seguridad nacional, pero también pone de manifiesto un conflicto entre la necesidad de fortalecer las fuerzas armadas y el deseo de no imponer cargas adicionales a los jóvenes. Aunque no se han tomado decisiones definitivas, la conversación nacional sobre la reinstauración del servicio militar obligatorio y sus posibles alternativas continúa evolucionando en Estados Unidos. Estados Unidos ha mantenido un ejército completamente voluntario desde 1973, año en que se abolió oficialmente el servicio militar obligatorio bajo la presidencia de Richard Nixon.