En el Parlamento Europeo, no hubo dudas sobre el objetivo de la nueva ley: permitir la circulación de automóviles y vehículos comerciales pequeños neutros en emisiones a partir de 2035.
Sin embargo, la ruta hacia la neutralidad climática en el transporte por carretera sigue siendo controvertida, y existen puntos de vista diferentes sobre las consecuencias que tendrá la ley para la industria automotriz europea.
La mayoría de los eurodiputados (sociales democráticos, verdes y liberales) estuvieron a favor de la eliminación de los motores de combustión que se utilizan actualmente.
Según el diputado liberal Jan Huitema, quien es responsable del texto legislativo, los vehículos eléctricos con baterías o hidrógeno como fuente de energía deberán dominar el mercado para 2035.
Huitema afirmó que estos requisitos claros han llevado a la industria automotriz a reestructurarse y adaptarse a las nuevas condiciones.