Entre el 16 y el 28 de abril de 2025, el zoológico de Chester registró el nacimiento de diez crías de pingüino Humboldt, marcando un año significativo para la especie en sus instalaciones. Este incremento poblacional contribuyó a que el total de ejemplares en el zoológico alcanzara los 63, en un contexto donde la especie enfrenta amenazas serias en su hábitat natural.

Uno de los nacimientos resaltó por la peculiaridad de la familia adoptiva: una pareja de machos, Scampi y Flounder, asumió el cuidado de un huevo procedente de Wotsit y Peach, otra pareja de pingüinos. Esta medida se tomó para garantizar una adecuada atención a todas las crías, facilitando así el equilibrio en las tareas parentales.

El cuidado de las crías contempla la provisión de alimento adicional por parte de los cuidadores del zoológico, quienes suministran pescado fresco. Los adultos lo transforman en una mezcla rica en proteínas, regurgitada especialmente para las crías, lo que ha permitido que estas cuadrupliquen su tamaño desde el nacimiento. El bienestar y el desarrollo de los polluelos se monitorean a través de pesajes regulares y revisiones de sus vías respiratorias.

Ocho de las diez nuevas crías han sido bautizadas con nombres de temática celestial: Ursa, Alcyone, Quasar, Orion, Dorado, Cassiopeia, Altair y Xena, mientras que los nombres de las otras dos se definirán mediante una votación pública en las redes sociales oficiales del zoológico.

Las crías están a pocos días de iniciar su aprendizaje en la natación, un paso esencial para su desarrollo. Simultáneamente, el zoológico refuerza su participación en el programa internacional de cría, cuyo objetivo es mantener una población genéticamente diversa de pingüinos Humboldt bajo cuidado humano.

La importancia de estos esfuerzos se acentúa ante la situación delicada de la especie: los pingüinos Humboldt figuran actualmente como vulnerables según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), y su población silvestre ha disminuido cerca de un 85% en los últimos 40 años por factores como la sobrepesca y el cambio climático.
La reciente nidada y la adopción de dinámicas de cuidado novedosas, como la crianza por parejas del mismo sexo, representan hitos relevantes para la continuidad de los programas de manejo y preservación de una de las especies de aves marinas más amenazadas del mundo.