El 1 de junio de 2025, Ucrania ejecutó la denominada “Operación Telaraña”, una ofensiva sin precedentes que involucró el lanzamiento coordinado de 117 drones contra instalaciones militares rusas. El ataque, que de acuerdo con el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) fue planeado durante 18 meses, se dirigió simultáneamente contra cuatro bases aéreas clave: Belaya en Irkutsk, ubicada en Siberia a más de 4,000 kilómetros de territorio ucraniano; Olenya en Murmansk; Dyagilevo en Ryazan e Ivanovo Severny en Ivanovo.
Cada dron fue controlado por un piloto y transportado dentro de contenedores disfrazados de cabañas de madera, ocultos en camiones, permitiendo su despliegue clandestino en territorio ruso. El ingenioso dispositivo abría el techo del contenedor por control remoto, lo que facilitó el despegue directo de los drones. La operación se realizó en múltiples zonas horarias, lo que evidenció una notable coordinación y precisión en la logística ucraniana.
La ofensiva resultó en la destrucción o daño de al menos 41 aeronaves rusas, según el SBU, incluyendo bombarderos estratégicos Tu-95, Tu-22M3, Tu-160 y aviones de reconocimiento A-50. De ese total, al menos 13 aviones fueron destruidos, aunque la evaluación completa de las pérdidas continúa. El costo estimado de los daños asciende a alrededor de 7 mil millones de dólares, equivalentes a 5.2 mil millones de libras esterlinas.
El Ministerio de Defensa ruso reconoció que varios aviones ardieron en las regiones de Murmansk e Irkutsk, aunque no proporcionó cifras detalladas. Adicionalmente, autoridades rusas anunciaron la detención de varios implicados en la operación, sin especificar su identidad o nacionalidad.
El ataque tuvo lugar poco antes de un diálogo previsto en Estambul entre representantes de ambos países. La magnitud de la “Operación Telaraña”, que llevó drones ucranianos hasta objetivos estratégicos de la aviación rusa en Siberia, representa un cambio relevante en la dinámica militar del conflicto y evidencia la capacidad de Ucrania para realizar acciones de largo alcance en territorio ruso.