El ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radosław Sikorski, ha hecho un llamamiento contundente a Europa para que refuerce significativamente su capacidad de defensa frente a lo que describió como las "ambiciones imperiales" de Rusia. Sikorski propuso una serie de medidas estratégicas, incluyendo la creación de una brigada mecanizada de la UE con 5,000 efectivos, y la implementación de votaciones por mayoría dentro de la Unión Europea para activar sanciones. Además, Polonia ha decidido destinar un 4% de su Producto Interno Bruto (PIB) a gastos de defensa, un porcentaje considerablemente alto en comparación con otros países europeos, invitando a sus aliados a seguir su ejemplo.
La propuesta de Sikorski incluye incentivos para los ciudadanos ucranianos que han evitado el servicio militar, incentivándolos a regresar y comprometerse con la defensa de su país. Este enfoque no solo busca fortalecer a Ucrania, sino también crear una alianza defensiva cohesiva que pueda actuar de manera decisiva frente a agresiones externas. Sikorski subrayó la importancia de reorientar la industria de defensa europea que ha estado marcada por años de subinversión, promoviendo así una mayor autosuficiencia en el ámbito de seguridad.
Polonia ha adoptado una postura firme y proactiva en la redistribución de su presupuesto hacia la defensa y la seguridad, algo que consideran absolutamente necesario para mantener la estabilidad y la paz en la región. Esta estratagema no solo parece una medida preventiva sino también una invitación a otros países de la UE a incrementar su compromiso en términos de inversión en defensa.