El presidente de la Corte Constitucional de Colombia, José Fernando Reyes, ha tenido que enfrentar accesos restringidos a medicamentos que le fueron prescritos. A pesar de estar afiliado a una Entidad Prestadora de Salud (EPS) con medicina prepagada desde 1997, ha tenido que recurrir a la intervención de la justicia para gestionar sus tratamientos. En los últimos tres meses, Reyes ha interpuesto dos tutelas debido a la negativa de su EPS de proporcionarle los medicamentos necesarios.
En una reciente entrevista, Reyes destacó que su caso no es único. De hecho, informó que entre 60,000 y 90,000 tutelas relacionadas con temas de salud se presentan mensualmente ante la Corte Constitucional, reflejando la alta demanda de servicios judiciales para garantizar el derecho a la salud en Colombia. Esta situación, según Reyes, es una muestra de las deficiencias estructurales del sistema.
La problemática trasciende el caso de Reyes. Ana María Vesga, presidenta de Acemi, la asociación que agrupa a las EPS del país, explicó que la falta de medicamentos en Colombia responde a varios factores. Entre ellos, mencionó los retrasos en los trámites de la Agencia Sanitaria, la falta de comunicación efectiva entre laboratorios y EPS, y la insuficiencia de recursos económicos para abastecer la demanda.
Reyes insistió en que su experiencia debe servir como una llamada de atención para abordar los fallos del sistema de salud que afectan a millones de colombianos. Según el presidente de la Corte Constitucional, la ineficiencia en la provisión de medicamentos y servicios no sólo atenta contra la salud de los ciudadanos, sino también contra su dignidad y derechos fundamentales.
Por su parte, Vesga llamó a una colaboración más efectiva entre todos los actores del sistema de salud y a una revisión exhaustiva de las políticas de financiación y gestión de recursos para evitar estos problemas recurrentes.