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Rusia Amplía su Lista de Fugitivos: Incluye a Primera Ministra de Estonia

En un movimiento que ha escalado las tensiones entre Rusia y Occidente, el gobierno ruso ha colocado a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, en su lista de personas buscadas, acusándola de acciones hostiles contra la memoria histórica de Rusia.

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Rusia Amplía su Lista de Fugitivos: Incluye a Primera Ministra de Estonia

En un movimiento que ha escalado las tensiones entre Rusia y Occidente, el gobierno ruso ha colocado a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, en su lista de personas buscadas, acusándola de acciones hostiles contra la memoria histórica de Rusia.

“Esto es una prueba más de que estoy haciendo lo correcto: el apoyo firme de la Unión Europea a Ucrania es un éxito y perjudica a Rusia”

- Declaró Kaja Kallas.

15/2/2024

El gobierno ruso ha intensificado sus acciones contra figuras políticas europeas al emitir una orden de detención contra la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, junto con otros destacados políticos europeos, acusándolos de desmantelar monumentos soviéticos en sus territorios. Esta medida, que también incluye al secretario de Estado de Estonia, Taimar Peterkop, y a una serie de legisladores y funcionarios de los países bálticos y Polonia, marca un nuevo capítulo en la creciente tensión entre Rusia y Occidente, especialmente en el contexto de la invasión rusa de Ucrania.

La decisión de Rusia de perseguir a Kallas y otros por la supuesta rehabilitación del nazismo, a través de la eliminación de monumentos soviéticos, ha sido criticada y vista como un acto simbólico y propagandístico dirigido principalmente a la audiencia interna rusa. La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, enfatizó que estas acciones son solo el comienzo de una respuesta a lo que consideran crímenes contra la memoria de quienes liberaron al mundo del nazismo.

Kallas ha respondido a estas acusaciones reafirmando su compromiso con la verdad y la justicia, destacando el apoyo continuo de Estonia a Ucrania frente a la agresión rusa. La primera ministra estonia ha sido una voz crítica contra las políticas del Kremlin, promoviendo sanciones y apoyo militar a Ucrania, lo que ha llevado a Rusia a considerar sus acciones como hostiles.

La inclusión de Kallas y otros políticos europeos en la lista de buscados por Rusia subraya la profundización de las fisuras entre Rusia y los países que anteriormente formaban parte de la Unión Soviética, que buscan afirmar su soberanía y alinearse más estrechamente con Occidente. Este acto también refleja la estrategia de Rusia de utilizar la memoria histórica y el patriotismo como herramientas en su confrontación geopolítica con Occidente.

Algo Curioso
La tensión entre Rusia y los países bálticos tiene raíces históricas profundas, remontándose a la era soviética. La independencia de estos países del dominio soviético en 1991 marcó el inicio de una relación compleja y a menudo tensa con Rusia, una dinámica que se ha intensificado con el conflicto en Ucrania.

La Memoria Histórica como Campo de Batalla

La escalada de acciones por parte de Rusia hacia figuras políticas de Europa, especialmente de los países bálticos, revela una estrategia más amplia de confrontación y narrativa histórica. Al colocar a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, y a otros políticos en su lista de buscados, Moscú no solo busca castigar lo que considera un ultraje a la memoria histórica, sino también enviar un mensaje contundente sobre su postura frente a la reconfiguración de la memoria colectiva y la descomunización en sus antiguos territorios.

La acusación de "rehabilitación del nazismo" por la eliminación de monumentos soviéticos se inserta en un contexto más amplio de cómo Rusia percibe su historia y su papel como liberador de Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Este enfoque ha sido criticado por países que sufrieron la ocupación soviética postguerra, quienes ven la remoción de estos monumentos como un paso necesario para reconciliarse con su pasado y afirmar su identidad nacional libre de la influencia rusa.

La respuesta de Kallas a las acciones de Rusia subraya la resiliencia y la determinación de Estonia y sus aliados en resistir la presión rusa y continuar apoyando a Ucrania. La solidaridad europea y el apoyo a Ucrania se han fortalecido en respuesta a la agresión rusa, y la inclusión de políticos europeos en listas de buscados por Rusia ha servido para galvanizar aún más este apoyo.

Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación este aumento de las tensiones, que no solo afecta las relaciones diplomáticas, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad y estabilidad en la región. La utilización de la memoria histórica y la propaganda como herramientas en este conflicto geopolítico revela las complejidades de la postura rusa y su impacto en las dinámicas internacionales.

Solidaridad Europea Frente a la Presión Rusa

La decisión de Rusia de incluir a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, y a otros políticos bálticos y europeos en su lista de buscados, más allá de ser un acto simbólico, refleja una escalada en la retórica y las acciones destinadas a intimidar y silenciar a aquellos que se oponen a sus políticas y acciones militares. Este movimiento se produce en un momento en que la tensión entre Rusia y la OTAN alcanza niveles no vistos desde la Guerra Fría, con el conflicto en Ucrania sirviendo como un punto crítico en las relaciones Este-Oeste.

La solidaridad y el apoyo a Ucrania por parte de Estonia y otros países bálticos han sido inquebrantables desde el inicio de la invasión rusa. Estonia, en particular, ha sido un firme defensor de sanciones más estrictas contra Rusia y ha aumentado su asistencia militar a Ucrania, reconociendo la importancia de la defensa colectiva y la seguridad regional en el enfrentamiento con las ambiciones expansionistas de Moscú.

La inclusión en la lista de buscados no solo es un intento de Rusia por castigar a los líderes europeos por su apoyo a Ucrania, sino también una señal de cómo el Kremlin utiliza la legislación y la retórica nacionalista para fomentar un sentimiento antioccidental entre su población. Al acusar a estos políticos de "destruir monumentos a los soldados soviéticos", Rusia intenta evocar un sentido de orgullo nacional y justificar sus acciones en Ucrania como una defensa de su historia y valores.

A pesar de las amenazas y la presión de Rusia, la respuesta de Kallas y de otros líderes europeos ha sido de firmeza y determinación. La unidad europea y el apoyo transatlántico a Ucrania se han fortalecido, demostrando que las tácticas de intimidación de Rusia no han logrado socavar el compromiso occidental con la defensa de la democracia y la soberanía nacional.

Fuentes

El País | France 24 | DW | The Guardian

“Esto es una prueba más de que estoy haciendo lo correcto: el apoyo firme de la Unión Europea a Ucrania es un éxito y perjudica a Rusia”

- Declaró Kaja Kallas.

Feb 15, 2024
Colglobal News

El gobierno ruso ha intensificado sus acciones contra figuras políticas europeas al emitir una orden de detención contra la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, junto con otros destacados políticos europeos, acusándolos de desmantelar monumentos soviéticos en sus territorios. Esta medida, que también incluye al secretario de Estado de Estonia, Taimar Peterkop, y a una serie de legisladores y funcionarios de los países bálticos y Polonia, marca un nuevo capítulo en la creciente tensión entre Rusia y Occidente, especialmente en el contexto de la invasión rusa de Ucrania.

La decisión de Rusia de perseguir a Kallas y otros por la supuesta rehabilitación del nazismo, a través de la eliminación de monumentos soviéticos, ha sido criticada y vista como un acto simbólico y propagandístico dirigido principalmente a la audiencia interna rusa. La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, enfatizó que estas acciones son solo el comienzo de una respuesta a lo que consideran crímenes contra la memoria de quienes liberaron al mundo del nazismo.

Kallas ha respondido a estas acusaciones reafirmando su compromiso con la verdad y la justicia, destacando el apoyo continuo de Estonia a Ucrania frente a la agresión rusa. La primera ministra estonia ha sido una voz crítica contra las políticas del Kremlin, promoviendo sanciones y apoyo militar a Ucrania, lo que ha llevado a Rusia a considerar sus acciones como hostiles.

La inclusión de Kallas y otros políticos europeos en la lista de buscados por Rusia subraya la profundización de las fisuras entre Rusia y los países que anteriormente formaban parte de la Unión Soviética, que buscan afirmar su soberanía y alinearse más estrechamente con Occidente. Este acto también refleja la estrategia de Rusia de utilizar la memoria histórica y el patriotismo como herramientas en su confrontación geopolítica con Occidente.

El gobierno ruso ha intensificado sus acciones contra figuras políticas europeas al emitir una orden de detención contra la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, junto con otros destacados políticos europeos, acusándolos de desmantelar monumentos soviéticos en sus territorios. Esta medida, que también incluye al secretario de Estado de Estonia, Taimar Peterkop, y a una serie de legisladores y funcionarios de los países bálticos y Polonia, marca un nuevo capítulo en la creciente tensión entre Rusia y Occidente, especialmente en el contexto de la invasión rusa de Ucrania.

La decisión de Rusia de perseguir a Kallas y otros por la supuesta rehabilitación del nazismo, a través de la eliminación de monumentos soviéticos, ha sido criticada y vista como un acto simbólico y propagandístico dirigido principalmente a la audiencia interna rusa. La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, enfatizó que estas acciones son solo el comienzo de una respuesta a lo que consideran crímenes contra la memoria de quienes liberaron al mundo del nazismo.

Kallas ha respondido a estas acusaciones reafirmando su compromiso con la verdad y la justicia, destacando el apoyo continuo de Estonia a Ucrania frente a la agresión rusa. La primera ministra estonia ha sido una voz crítica contra las políticas del Kremlin, promoviendo sanciones y apoyo militar a Ucrania, lo que ha llevado a Rusia a considerar sus acciones como hostiles.

La inclusión de Kallas y otros políticos europeos en la lista de buscados por Rusia subraya la profundización de las fisuras entre Rusia y los países que anteriormente formaban parte de la Unión Soviética, que buscan afirmar su soberanía y alinearse más estrechamente con Occidente. Este acto también refleja la estrategia de Rusia de utilizar la memoria histórica y el patriotismo como herramientas en su confrontación geopolítica con Occidente.

Algo Curioso
La tensión entre Rusia y los países bálticos tiene raíces históricas profundas, remontándose a la era soviética. La independencia de estos países del dominio soviético en 1991 marcó el inicio de una relación compleja y a menudo tensa con Rusia, una dinámica que se ha intensificado con el conflicto en Ucrania.

La Memoria Histórica como Campo de Batalla

La escalada de acciones por parte de Rusia hacia figuras políticas de Europa, especialmente de los países bálticos, revela una estrategia más amplia de confrontación y narrativa histórica. Al colocar a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, y a otros políticos en su lista de buscados, Moscú no solo busca castigar lo que considera un ultraje a la memoria histórica, sino también enviar un mensaje contundente sobre su postura frente a la reconfiguración de la memoria colectiva y la descomunización en sus antiguos territorios.

La acusación de "rehabilitación del nazismo" por la eliminación de monumentos soviéticos se inserta en un contexto más amplio de cómo Rusia percibe su historia y su papel como liberador de Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Este enfoque ha sido criticado por países que sufrieron la ocupación soviética postguerra, quienes ven la remoción de estos monumentos como un paso necesario para reconciliarse con su pasado y afirmar su identidad nacional libre de la influencia rusa.

La respuesta de Kallas a las acciones de Rusia subraya la resiliencia y la determinación de Estonia y sus aliados en resistir la presión rusa y continuar apoyando a Ucrania. La solidaridad europea y el apoyo a Ucrania se han fortalecido en respuesta a la agresión rusa, y la inclusión de políticos europeos en listas de buscados por Rusia ha servido para galvanizar aún más este apoyo.

Mientras tanto, la comunidad internacional observa con preocupación este aumento de las tensiones, que no solo afecta las relaciones diplomáticas, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad y estabilidad en la región. La utilización de la memoria histórica y la propaganda como herramientas en este conflicto geopolítico revela las complejidades de la postura rusa y su impacto en las dinámicas internacionales.

Solidaridad Europea Frente a la Presión Rusa

La decisión de Rusia de incluir a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, y a otros políticos bálticos y europeos en su lista de buscados, más allá de ser un acto simbólico, refleja una escalada en la retórica y las acciones destinadas a intimidar y silenciar a aquellos que se oponen a sus políticas y acciones militares. Este movimiento se produce en un momento en que la tensión entre Rusia y la OTAN alcanza niveles no vistos desde la Guerra Fría, con el conflicto en Ucrania sirviendo como un punto crítico en las relaciones Este-Oeste.

La solidaridad y el apoyo a Ucrania por parte de Estonia y otros países bálticos han sido inquebrantables desde el inicio de la invasión rusa. Estonia, en particular, ha sido un firme defensor de sanciones más estrictas contra Rusia y ha aumentado su asistencia militar a Ucrania, reconociendo la importancia de la defensa colectiva y la seguridad regional en el enfrentamiento con las ambiciones expansionistas de Moscú.

La inclusión en la lista de buscados no solo es un intento de Rusia por castigar a los líderes europeos por su apoyo a Ucrania, sino también una señal de cómo el Kremlin utiliza la legislación y la retórica nacionalista para fomentar un sentimiento antioccidental entre su población. Al acusar a estos políticos de "destruir monumentos a los soldados soviéticos", Rusia intenta evocar un sentido de orgullo nacional y justificar sus acciones en Ucrania como una defensa de su historia y valores.

A pesar de las amenazas y la presión de Rusia, la respuesta de Kallas y de otros líderes europeos ha sido de firmeza y determinación. La unidad europea y el apoyo transatlántico a Ucrania se han fortalecido, demostrando que las tácticas de intimidación de Rusia no han logrado socavar el compromiso occidental con la defensa de la democracia y la soberanía nacional.

Fuentes

El País | France 24 | DW | The Guardian

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