Rusia ha sobrepasado a Europa en términos de gasto militar para 2024, destinando 462.000 millones de dólares, mientras que la inversión combinada de los países de la Unión Europea y el Reino Unido asciende a 457.000 millones de dólares. Según el estudio del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS), este presupuesto equivale a aproximadamente el 6,7% del PIB ruso, superando con creces el promedio del 1,7% del PIB asignado por los países europeos.
El informe también señala que Rusia planea un aumento en su gasto militar para 2025, proyectado en 15,6 billones de rublos (aproximadamente 145.900 millones de dólares), lo cual representa un incremento del 14% en comparación con el año anterior. Al considerar la paridad de poder adquisitivo, el gasto militar ruso podría aproximarse a 461.600 millones de dólares.
En contraste, el gasto en defensa europeo ha mostrado un incremento constante, aumentando más del 50% en términos nominales desde 2014 y un 11,7% en términos reales respecto al último año. Alemania lidera la inversión armamentística dentro de la OTAN en Europa, con un presupuesto de 78.900 millones de euros. Sin embargo, algunos países, como España, destinan apenas el 1,3% de su PIB, situándose por debajo de la media europea. El gasto militar combinado de Europa y Rusia en 2024 supera el PIB total de países como Sudáfrica o Finlandia, subrayando la magnitud de los recursos destinados a la defensa en ambos lados.
Desde el inicio del conflicto en Ucrania, Rusia ha perdido cerca de 14.000 vehículos de combate, incluidos tanques y transportes de tropas, según el reporte. A pesar de estas pérdidas, su capacidad de producción de armamento se mantendría intacta, gracias a reservas heredadas de la era soviética y el apoyo recibido de países como Corea del Norte e Irán.
El informe subraya las ramificaciones estratégicas de esta tendencia. La Comisión Europea ha sugerido que podría ser necesario un incremento de 500.000 millones de euros en el presupuesto militar europeo durante la próxima década. En paralelo, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, advirtió que Rusia podría estar preparándose para entablar una "guerra a gran escala" en Europa dentro de un periodo de cinco años, aumentando la presión para que los gobiernos europeos refuercen sus capacidades defensivas.
La guerra en Ucrania ha motivado a Europa a incrementar su presupuesto militar significativamente, logrando un nivel 50% mayor al de hace una década. Sin embargo, los expertos señalan que el gasto actual sigue siendo insuficiente para cerrar la brecha frente al crecimiento del presupuesto militar ruso y las amenazas geopolíticas emergentes.