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Más de 140 muertos por un terremoto en Myanmar mientras Tailandia intenta rescatar a decenas de personas atrapadas bajo un rascacielos en Bangkok

Un potente terremoto de magnitud 7.7 sacudió Myanmar el 28 de marzo de 2025, causando devastación en varias ciudades del país y afectando también a Tailandia. El epicentro, ubicado a 17.2 km de Mandalay, generó un fuerte movimiento que resultó en colapsos estructurales, cientos de muertes y miles de heridos. Horas críticas se viven mientras continúan las labores de rescate.

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Más de 140 muertos por un terremoto en Myanmar mientras Tailandia intenta rescatar a decenas de personas atrapadas bajo un rascacielos en Bangkok

Un potente terremoto de magnitud 7.7 sacudió Myanmar el 28 de marzo de 2025, causando devastación en varias ciudades del país y afectando también a Tailandia. El epicentro, ubicado a 17.2 km de Mandalay, generó un fuerte movimiento que resultó en colapsos estructurales, cientos de muertes y miles de heridos. Horas críticas se viven mientras continúan las labores de rescate.

Las operaciones de rescate enfrentan muchas complicaciones debido a los daños estructurales, la falta de recursos y la compleja situación política actual.

28/3/2025

El centro de Myanmar fue sacudido el 28 de marzo de 2025 por un fuerte terremoto de magnitud 7.7 a las 12:50 p.m., hora local. El epicentro se localizó a 17.2 km de Mandalay, la segunda ciudad más grande del país, y tuvo una profundidad de 10 km, lo que maximizó el impacto en la superficie. Apenas 12 minutos después, un aftershock de magnitud 6.4 complicó aún más la situación en la región.

Las consecuencias fueron devastadoras para Myanmar y Tailandia. En Myanmar, las autoridades confirmaron la muerte de al menos 144 personas y 732 heridos, cifras que podrían aumentar mientras las labores de rescate continúan. Las áreas más afectadas incluyen Mandalay, Toungoo y Aungban. El estado de emergencia ha sido declarado en seis regiones, y hospitales de ciudades como Naypyidaw están desbordados, llevando a tratar a muchos heridos al aire libre debido a los daños en las infraestructuras médicas.

En Tailandia, al menos 10 personas perdieron la vida, incluyendo 7 de ellas durante el colapso de un rascacielos en un sitio de construcción en Bangkok. Se reportan además 81 trabajadores atrapados bajo los escombros de dicha estructura. La administración metropolitana de la ciudad ha declarado Bangkok como zona de desastre, movilizando equipos de rescate y usando drones para localizar sobrevivientes.

El impacto en la infraestructura es extenso en ambas naciones. En Myanmar, colapsó un puente que conectaba Mandalay con Sagaing, dificultando aún más el transporte de ayuda y los esfuerzos de rescate en la región. En Naypyidaw, calles agrietadas y edificios dañados complejizan las tareas de evaluación de daños. La falta de comunicación y el control de información por parte del gobierno militar agravaron la capacidad de respuesta inmediata en varias áreas.

A nivel internacional, organizaciones como la OMS han activado su sistema de emergencia para enviar suministros médicos a la región. Entidades como la Unión Europea y la Cruz Roja han ofrecido asistencia para enfrentar la crisis humanitaria y proporcionar la ayuda necesaria en las zonas más afectadas.

Testigos que experimentaron el terremoto en Mandalay describieron imágenes de caos, con edificios colapsados y muchas personas atrapadas bajo los escombros. Relataron además la falta de materiales y equipos adecuados para rescatar a las víctimas. Según funcionarios, la situación política y la limitada disposición de recursos dificultan aún más las operaciones de ayuda.

Este terremoto ya es considerado uno de los eventos sísmicos más devastadores en la región en décadas, tanto por su magnitud como por la pérdida de vidas y el daño a la infraestructura crítica.

Algo Curioso
Con una profundidad de tan solo 10 km, este terremoto se considera uno de los más superficiales, lo cual genera un impacto más severo en las regiones cercanas al epicentro.

Las operaciones de rescate enfrentan muchas complicaciones debido a los daños estructurales, la falta de recursos y la compleja situación política actual.

Mar 28, 2025
Colglobal News

El centro de Myanmar fue sacudido el 28 de marzo de 2025 por un fuerte terremoto de magnitud 7.7 a las 12:50 p.m., hora local. El epicentro se localizó a 17.2 km de Mandalay, la segunda ciudad más grande del país, y tuvo una profundidad de 10 km, lo que maximizó el impacto en la superficie. Apenas 12 minutos después, un aftershock de magnitud 6.4 complicó aún más la situación en la región.

Las consecuencias fueron devastadoras para Myanmar y Tailandia. En Myanmar, las autoridades confirmaron la muerte de al menos 144 personas y 732 heridos, cifras que podrían aumentar mientras las labores de rescate continúan. Las áreas más afectadas incluyen Mandalay, Toungoo y Aungban. El estado de emergencia ha sido declarado en seis regiones, y hospitales de ciudades como Naypyidaw están desbordados, llevando a tratar a muchos heridos al aire libre debido a los daños en las infraestructuras médicas.

En Tailandia, al menos 10 personas perdieron la vida, incluyendo 7 de ellas durante el colapso de un rascacielos en un sitio de construcción en Bangkok. Se reportan además 81 trabajadores atrapados bajo los escombros de dicha estructura. La administración metropolitana de la ciudad ha declarado Bangkok como zona de desastre, movilizando equipos de rescate y usando drones para localizar sobrevivientes.

El impacto en la infraestructura es extenso en ambas naciones. En Myanmar, colapsó un puente que conectaba Mandalay con Sagaing, dificultando aún más el transporte de ayuda y los esfuerzos de rescate en la región. En Naypyidaw, calles agrietadas y edificios dañados complejizan las tareas de evaluación de daños. La falta de comunicación y el control de información por parte del gobierno militar agravaron la capacidad de respuesta inmediata en varias áreas.

A nivel internacional, organizaciones como la OMS han activado su sistema de emergencia para enviar suministros médicos a la región. Entidades como la Unión Europea y la Cruz Roja han ofrecido asistencia para enfrentar la crisis humanitaria y proporcionar la ayuda necesaria en las zonas más afectadas.

Testigos que experimentaron el terremoto en Mandalay describieron imágenes de caos, con edificios colapsados y muchas personas atrapadas bajo los escombros. Relataron además la falta de materiales y equipos adecuados para rescatar a las víctimas. Según funcionarios, la situación política y la limitada disposición de recursos dificultan aún más las operaciones de ayuda.

Este terremoto ya es considerado uno de los eventos sísmicos más devastadores en la región en décadas, tanto por su magnitud como por la pérdida de vidas y el daño a la infraestructura crítica.

El centro de Myanmar fue sacudido el 28 de marzo de 2025 por un fuerte terremoto de magnitud 7.7 a las 12:50 p.m., hora local. El epicentro se localizó a 17.2 km de Mandalay, la segunda ciudad más grande del país, y tuvo una profundidad de 10 km, lo que maximizó el impacto en la superficie. Apenas 12 minutos después, un aftershock de magnitud 6.4 complicó aún más la situación en la región.

Las consecuencias fueron devastadoras para Myanmar y Tailandia. En Myanmar, las autoridades confirmaron la muerte de al menos 144 personas y 732 heridos, cifras que podrían aumentar mientras las labores de rescate continúan. Las áreas más afectadas incluyen Mandalay, Toungoo y Aungban. El estado de emergencia ha sido declarado en seis regiones, y hospitales de ciudades como Naypyidaw están desbordados, llevando a tratar a muchos heridos al aire libre debido a los daños en las infraestructuras médicas.

En Tailandia, al menos 10 personas perdieron la vida, incluyendo 7 de ellas durante el colapso de un rascacielos en un sitio de construcción en Bangkok. Se reportan además 81 trabajadores atrapados bajo los escombros de dicha estructura. La administración metropolitana de la ciudad ha declarado Bangkok como zona de desastre, movilizando equipos de rescate y usando drones para localizar sobrevivientes.

El impacto en la infraestructura es extenso en ambas naciones. En Myanmar, colapsó un puente que conectaba Mandalay con Sagaing, dificultando aún más el transporte de ayuda y los esfuerzos de rescate en la región. En Naypyidaw, calles agrietadas y edificios dañados complejizan las tareas de evaluación de daños. La falta de comunicación y el control de información por parte del gobierno militar agravaron la capacidad de respuesta inmediata en varias áreas.

A nivel internacional, organizaciones como la OMS han activado su sistema de emergencia para enviar suministros médicos a la región. Entidades como la Unión Europea y la Cruz Roja han ofrecido asistencia para enfrentar la crisis humanitaria y proporcionar la ayuda necesaria en las zonas más afectadas.

Testigos que experimentaron el terremoto en Mandalay describieron imágenes de caos, con edificios colapsados y muchas personas atrapadas bajo los escombros. Relataron además la falta de materiales y equipos adecuados para rescatar a las víctimas. Según funcionarios, la situación política y la limitada disposición de recursos dificultan aún más las operaciones de ayuda.

Este terremoto ya es considerado uno de los eventos sísmicos más devastadores en la región en décadas, tanto por su magnitud como por la pérdida de vidas y el daño a la infraestructura crítica.

Algo Curioso
Con una profundidad de tan solo 10 km, este terremoto se considera uno de los más superficiales, lo cual genera un impacto más severo en las regiones cercanas al epicentro.

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