Tesla Inc., el gigante de los vehículos eléctricos, ha sufrido un duro golpe en el mercado de valores, perdiendo aproximadamente 80.000 millones de dólares en valor bursátil en un solo día. Esta caída, que representa una disminución del 12% en el precio de sus acciones, se produjo tras la publicación de los resultados financieros del último trimestre de 2023 y las previsiones para 2024. Los inversores reaccionaron negativamente a la noticia de que el crecimiento de Tesla en el próximo año podría ser "notablemente inferior" al experimentado en 2023.
El informe de Tesla reveló que, aunque los ingresos aumentaron un 3% en el último trimestre de 2023, el crecimiento fue menor al esperado, especialmente en el sector automotriz, que solo vio un aumento del 1%. Esta desaceleración se atribuye en parte a las rebajas de precios implementadas por la empresa para estimular la demanda. A pesar de un aumento en el volumen de ventas, estos esfuerzos no se tradujeron en un crecimiento significativo de los ingresos.
El CEO de Tesla, Elon Musk, ha confirmado que la compañía se está preparando para lanzar un nuevo modelo de vehículo hacia finales de 2025. Este nuevo modelo, según Musk, incorporará una tecnología de fabricación revolucionaria. Sin embargo, los analistas expresan preocupación, señalando que los plazos estimados por Tesla a menudo sufren retrasos y que este nuevo proceso de fabricación podría presentar desafíos adicionales.
Además, la compañía enfrenta una creciente competencia en el mercado de vehículos eléctricos. Fabricantes como BYD de China han comenzado a erosionar la cuota de mercado de Tesla, lo que ha llevado a la empresa a implementar rebajas de precios. Estas rebajas, aunque necesarias para mantener la competitividad, han tenido un impacto negativo en los márgenes de beneficio de Tesla.