Los líderes Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, y Volodymyr Zelenskyy, presidente de Ucrania, sostuvieron una llamada telefónica que marcó su primer acercamiento tras tensiones evidenciadas tres semanas antes en un encuentro en la Casa Blanca. Trump describió la llamada de aproximadamente una hora como "muy buena", mientras que Zelenskyy la calificó como "positiva, muy sustancial y franca".
Durante la conversación, Zelenskyy aceptó un alto el fuego parcial previamente acordado por Trump y Vladimir Putin, presidente de Rusia, apenas un día antes. Este pacto incluye una pausa en los ataques sobre la infraestructura energética y un cese de hostilidades en el Mar Negro. Sin embargo, un alto el fuego completo fue rechazado por Putin, quien argumentó límites en las conversaciones de paz en curso.
Los temas centrales incluyeron la alineación de las necesidades y solicitudes de Ucrania y Rusia en las negociaciones de paz. Zelenskyy comunicó que su equipo diplomático estaba listo para abordar y resolver los aspectos técnicos que permitan ampliar el alcance del alto el fuego parcial. Pese a estos avances, destacó su desconfianza hacia el Kremlin tras registrarse 150 ataques con drones dirigidos a infraestructuras clave como energía, transporte y hospitales en Ucrania la noche anterior.
Además, Zelenskyy reafirmó que Ucrania no reconocerá como territorio ruso ninguna región ocupada, sosteniendo firmemente que "no lo aceptaremos". Por su parte, el Kremlin continúa presionando para condicionar futuros acuerdos más amplios al cese de la asistencia militar y de inteligencia por parte de Estados Unidos y aliados a Ucrania.
En el ámbito militar, Zelenskyy y Trump acordaron intensificar la colaboración mediante el intercambio de información entre los mandos de defensa de ambos países. Por otro lado, se celebró un intercambio recíproco de prisioneros de guerra, liberando a 175 personas de cada lado, lo cual Zelenskyy valoró como un paso positivo en la recuperación de defensores ucranianos.
Asimismo, Trump utilizó su plataforma Truth Social para brindar detalles adicionales sobre la llamada, indicando que gran parte de esta se basó en negociaciones previas con Putin. Trump además sugirió que Estados Unidos asuma la propiedad de las plantas de energía nuclear de Ucrania, argumentando que este control brindaría la mayor protección contra posibles amenazas rusas.
La llamada entre Trump y Zelenskyy marca un momento clave en las tensas relaciones globales, buscando sentar las bases para un progreso diplomático a pesar de los desafíos persistentes.
A pesar de los múltiples pactos de alto el fuego en conflictos internacionales, estudios recientes revelan que el 37% fracasan por falta de garantías sólidas o violaciones inmediatas tras su implementación.