El 23 de marzo de 2025, un ataque efectuado por las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) en Rafah, Gaza, culminó con la muerte de 15 paramédicos y trabajadores de rescate palestinos. Entre las víctimas se encontraban miembros de la Media Luna Roja Palestina y un empleado de las Naciones Unidas. Este incidente, que ha sido catalogado como un posible crimen de guerra, desencadenó fuertes reacciones internacionales al tiempo que genera cuestionamientos acerca de las acciones militares israelíes en la región.
La Media Luna Roja Palestina presentó un video de casi siete minutos recuperado del teléfono de Rifat Radwan, uno de los paramédicos fallecidos. En las imágenes se observa a ambulancias y un camión de bomberos detenidos con luces de emergencia encendidas mientras asistían a un vehículo averiado. En el registro, Radwan es escuchado recitando la shahada (declaración de fe musulmana) justo antes de que comience un tiroteo. El video finaliza abruptamente cuando los disparos impactan y oscurecen el cuadro.
Un ataque el 23 de marzo de 2025 en Rafah, Gaza, llevado a cabo por el ejército israelí, resultó en el asesinato de 15 paramédicos y trabajadores de rescate palestinos, entre los que se encontraban miembros de la Media Luna Roja y un empleado de la ONU.https://t.co/bS9xB0ere3 pic.twitter.com/LMynyt5AUT
— Colglobalnews.com (@ColglobalNews) April 5, 2025
Pese a la evidencia videográfica, las IDF alegaron haber disparado a "terroristas" a bordo de vehículos sospechosos que se aproximaban, y en un inicio afirmaron que los vehículos carecían de luces de emergencia, algo que posteriormente admitieron como incorrecto. Testigos y médicos que recuperaron los cadáveres tras el suceso describieron múltiples señales de posible ejecución, incluyendo cuerpos maniatados y heridas de bala en la cabeza y el pecho. Según el Dr. Ahmed al-Farra, quien estuvo presente en la recuperación de los cuerpos, los indicios son consistentes con ejecuciones a corta distancia.
Los cuerpos de las víctimas fueron hallados en una fosa común con signos evidentes de haber sido sometidos a disparos directos. En respuesta, la ONU y la Media Luna Roja Palestina han solicitado una investigación independiente, subrayando el estatus de los trabajadores humanitarios como protegidos por el derecho internacional. Volker Turk, Comisionado de Derechos Humanos, expresó su preocupación por posibles crímenes de guerra y pidió la rendición de cuentas.
El contexto de este ataque se sitúa en un marco de creciente violencia en Gaza. Las operaciones militares israelíes se reanudaron el 18 de marzo de 2025, tras el colapso de un alto el fuego que se había mantenido durante dos meses. Desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, el conflicto ha provocado más de 50,000 muertes entre los palestinos, la mayoría mujeres y niños. Asimismo, la cifra de trabajadores humanitarios asesinados en Gaza ha superado los 408, incluyendo los 15 fallecidos en este trágico suceso.
Si bien las IDF aseguran estar investigando el incidente, rechazan las acusaciones de ejecuciones sumarias y sostienen que los disparos se efectuaron en respuesta al movimiento considerado sospechoso de los vehículos.
El ataque de Rafah ha suscitado amplias condenas y renovado las preocupaciones globales respecto a la falta de protección para los trabajadores humanitarios en conflictos armados, planteando un nuevo capítulo en las tensiones internacionales y en el largo historial de denuncias sobre violaciones del derecho internacional en la región.
Entre los paramédicos asesinados se encontraba un empleado de la ONU, un hecho que resalta la presión sobre la comunidad internacional para abordar la violencia recurrente en Gaza y proteger a los trabajadores humanitarios.