La votación anticipada para las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos ha alcanzado cifras históricas, con más de 75 millones de ciudadanos ejerciendo su derecho al voto antes del día de la elección. Esto representa aproximadamente el 43% de la participación total observada en las elecciones de 2020, el récord más alto hasta la fecha debido a la pandemia de COVID-19.
Según datos recientes, de los 66,9 millones de votos anticipados, 35,7 millones han sido emitidos por votantes registrados como republicanos que han votado en persona, mientras que los demócratas han dominado el voto por correo con 30,9 millones de boletas entregadas. En términos de afiliación partidista, los votantes demócratas han emitido 12,9 millones de votos (38,7%), los republicanos 12 millones (36,0%), y los independientes 8,5 millones (25,4%).
Las tendencias demográficas revelan que en Pennsylvania, casi la mitad de los votos anticipados provienen de votantes mayores de 65 años, de los cuales el 58% son demócratas y el 35% republicanos. Además, las mujeres representan aproximadamente el 54% de los votos anticipados en algunos estados, favoreciendo potencialmente a la campaña de Kamala Harris.
En estados clave como Arizona, los republicanos han incrementado notablemente su participación masculina, con 86,000 nuevos votantes registrados. En Georgia, más de 700,000 votantes que participaron en la votación anticipada en 2024 no lo hicieron en 2020, indicando una fuerte movilización de votantes republicanos. En Pennsylvania, aunque los demócratas poseen una ventaja del 57% en el voto por correo, esta es menor comparado con 2020.
Las encuestas reflejan una contienda sumamente cerrada, con Kamala Harris manteniendo una leve ventaja del 48% sobre el 47% de Donald Trump a nivel nacional. En los estados cruciales, ambos candidatos están empatados en Pennsylvania, mientras que Harris lleva una ligera ventaja en Michigan y Wisconsin.
Ambos candidatos están intensificando sus campañas en los estados decisivos, con múltiples mítines programados en los días previos a la elección. El objetivo es captar el apoyo de los votantes indecisos y movilizar a sus respectivas bases.
La presente situación de la votación anticipada proporciona una visión clara de los patrones y tendencias que podrían influir significativamente en el resultado de las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos, destacando la movilización de votantes y la intensa competencia entre los partidos.