Joel Alves, un veterinario dedicado a la conservación de la vida silvestre, ha revolucionado las prácticas de traslado de grandes animales con su enfoque aéreo. Recientemente, Alves compartió un video que muestra cómo traslada a un par de leones, profundamente sedados, a 3.000 metros de altura. Estos majestuosos felinos, ubicados entre sus piernas en la cabina de un avión, son parte de un esfuerzo más amplio para preservar la diversidad genética en el vasto Parque Nacional Kruger.
Este método de transporte no es un capricho, sino una necesidad logística. Según Alves, las carreteras y los viajes terrestres en la región pueden ser extremadamente largos y complicados. Utilizar el avión permite cubrir grandes distancias en un tiempo mucho más corto, lo cual es crucial para el bienestar de los animales y la eficiencia del proceso de reubicación.

El trabajo de Alves no solo se centra en los leones. Regularmente, se encuentra trasladando una variedad de grandes animales, cada uno con sus propios desafíos y necesidades. Este enfoque innovador es parte de un esfuerzo más grande para combatir los efectos del aislamiento genético y la fragmentación del hábitat, problemas comunes en las áreas de conservación.
Viajar con leones sedados a bordo de un avión podría parecer aterrador para muchos, pero Alves confía plenamente en los sedantes utilizados. Aunque admite que el corazón se le detiene cuando los leones se mueven ligeramente durante el vuelo, asegura que la situación está bajo control y que los animales están seguros durante todo el proceso.