El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, llegó a Ankara, Turquía, para esperar una inédita reunión directa con el presidente ruso Vladimir Putin el jueves 15 de mayo de 2025. De concretarse, la cita podría trasladarse a Estambul y significaría el primer encuentro directo entre ambos desde diciembre de 2019, pues las negociaciones anteriores tuvieron lugar virtualmente en marzo de 2022, semanas después de iniciada la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania.
Zelenskyy ha declarado que su visita a Turquía representa un gesto concreto en busca de la paz y que interpretará la ausencia de Putin como un desinterés ruso en poner fin a las hostilidades. Por su parte, el Kremlin no ha confirmado la presencia de Putin, aunque ha comunicado que una delegación de alto nivel se encuentra en preparación. Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, se abstuvo de ofrecer detalles sobre la potencial asistencia del mandatario ruso.
Durante el fin de semana, Putin propuso avanzar conversaciones directas en Estambul, pero descartó aceptar las condiciones de Ucrania y sus aliados para instaurar un alto el fuego inmediato antes del lunes, posibilidad que podría derivar en la ejecución de sanciones adicionales por parte de Occidente.
En el ámbito internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha sido objeto de presión para incorporarse personalmente a las negociaciones en Turquía. No obstante, aunque no ha confirmado su asistencia, insinuó que podría acudir si percibe un escenario propicio para el diálogo. Paralelamente, la Casa Blanca confirmó el desplazamiento a Estambul de dos enviados de alto nivel: Steve Witkoff y Keith Kellogg.
Zelenskyy insistió en que solo Putin tiene la capacidad de decidir sobre el alto el fuego, e instó a Estados Unidos a implementar un paquete de sanciones más severas si Moscú cancela la reunión o rechaza los acuerdos propuestos.
Las demandas de Rusia en la mesa de negociación han sido definidas como máximas e incluyen la denominación de “desnazificación del régimen de Kyiv” y el control absoluto sobre las cuatro regiones ucranianas anexadas ilegalmente por Rusia en 2022: Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia.
En paralelo, los líderes de Reino Unido, Francia, Alemania y Polonia llevaron a cabo una reciente visita a Kyiv con el objetivo de presionar y establecer como límite el lunes para un cese al fuego, advirtiendo a Moscú sobre severas consecuencias de tipo político y económico en caso de no acatar este plazo.
Desde la invasión rusa a gran escala en febrero de 2022, el conflicto ha provocado la muerte de decenas de miles de personas y el desplazamiento forzoso de millones, incrementando la tensión internacional y motivando paquetes progresivos de sanciones internacionales contra Rusia.
La reunión en Turquía representa un momento crítico para las conversaciones de paz y el desarrollo del conflicto, con expectativas centradas en la posible respuesta del Kremlin y el resultado de las negociaciones entre las partes involucradas.