El 7 de junio de 2025, Donald Trump advirtió a Elon Musk que enfrentar “consecuencias muy serias” en caso de financiar a candidatos demócratas, después de que Musk calificara el proyecto de ley presupuestaria republicana “One Big Beautiful Bill Act” como una “abominación”. La tensión entre ambos surge después de que Musk apoyara la reelección de Trump con aproximadamente $300 millones en 2024. En entrevista para NBC News, Trump informó que la relación con Musk ha terminado y descartó toda posibilidad de reconciliación, afirmando que no tiene planes de dialogar con el empresario por el momento.
El presidente recalcó que, si Musk decide respaldar a los demócratas, tendrá que asumir consecuencias, aunque no especificó cuáles serían. Trump aseguró que la ruptura con Musk ha fortalecido la unidad interna del Partido Republicano, especialmente en el marco de la discusión sobre la nueva legislación presupuestaria.
El “One Big Beautiful Bill Act”, avalado por la Cámara de Representantes con un solo voto de diferencia y actualmente en debate en el Senado, contempla la extensión de los recortes fiscales de 2017 y establece incrementos en partidas destinadas a seguridad fronteriza y gasto militar. Para compensar el gasto, la iniciativa propone recortes en Medicaid, cupones de alimentos y créditos fiscales para energías renovables. Evaluaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso y expertos independientes estiman que la ley podría ampliar el déficit federal entre $2.3 billones y $5 billones durante la próxima década.
Trump se mostró confiado en que el Senado aprobará la legislación antes del 4 de julio. Además, acusó a Musk de “irrespetuoso con la oficina de la presidencia” y señaló la eliminación de un tuit en el que Musk hacía referencia a supuestos vínculos entre Trump y Jeffrey Epstein, un tema al que el mandatario restó importancia.
El vicepresidente J.D. Vance expresó en un podcast que Musk estaría cometiendo un “enorme error” al confrontar a Trump y manifestó su deseo de que el empresario “vuelva al redil”. Vance sugirió que Musk pudo haber actuado movido por la frustración.
La discordia pública entre Trump y Musk, además de impactar la dinámica interna del Partido Republicano, adquiere relevancia en el contexto de las elecciones legislativas de noviembre de 2026, en las cuales se renovarán los 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado.