Mundo

Se Estancan Negociaciones de Paz en Gaza con la Llegada de Ramadan, el Mes Sagrado

Las negociaciones para alcanzar un cese al fuego en Gaza antes del inicio del mes sagrado de Ramadan se encuentran en un punto muerto, a pesar de los esfuerzos internacionales. Las delegaciones de Hamas y mediadores internacionales no han logrado avances significativos en los últimos días de diálogo en El Cairo.

Mundo

Se Estancan Negociaciones de Paz en Gaza con la Llegada de Ramadan, el Mes Sagrado

Las negociaciones para alcanzar un cese al fuego en Gaza antes del inicio del mes sagrado de Ramadan se encuentran en un punto muerto, a pesar de los esfuerzos internacionales. Las delegaciones de Hamas y mediadores internacionales no han logrado avances significativos en los últimos días de diálogo en El Cairo.

“Netanyahu no quiere llegar a un acuerdo y ahora la pelota está en el campo de los estadounidenses”,

- Basem Naim, jefe de la división política de Hamas en Gaza.

5/3/2024

Las negociaciones para establecer un cese al fuego en la franja de Gaza han entrado en un estado de estancamiento a medida que se acerca el inicio del Ramadan, la fecha límite no oficial para alcanzar un acuerdo. Durante dos días de conversaciones en El Cairo, las partes involucradas no han conseguido romper el impasse, principalmente debido a la ausencia de una delegación israelí en la última ronda de negociaciones. Este estancamiento ocurre en un momento crítico, dado el deterioro humanitario en Gaza y la presión internacional para evitar un mayor derramamiento de sangre.

A pesar de los esfuerzos de mediación liderados por Egipto, Qatar y Estados Unidos, las demandas de ambos lados han complicado el progreso hacia un acuerdo. Hamas ha exigido la entrada de ayuda humanitaria a gran escala en Gaza y el retorno de los palestinos desplazados de sus hogares, especialmente en el norte del territorio costero. Por otro lado, Israel solicita la liberación de los rehenes capturados durante el ataque sorpresa de Hamas el 7 de octubre de 2023, como parte de un acuerdo de tregua que inicialmente duraría seis semanas, comenzando con el mes de Ramadan.

Las conversaciones en El Cairo, marcadas por la urgencia del inminente Ramadan, han resaltado la complejidad de las negociaciones. A pesar de la presencia de la delegación de Hamas y los esfuerzos de los mediadores internacionales, la falta de consenso y la reticencia de Israel a participar directamente en la última ronda han puesto de manifiesto la dificultad de alcanzar una paz duradera. La situación se ve agravada por el bloqueo indefinido impuesto por Israel y Egipto desde que Hamas ganó las elecciones legislativas en 2007, lo que ha convertido a Gaza en lo que muchas organizaciones de derechos humanos describen como la prisión a cielo abierto más grande del mundo.

A medida que las negociaciones continúan, la comunidad internacional observa con preocupación la posibilidad de que el conflicto se intensifique durante el Ramadan, un período que históricamente ha visto un aumento en la violencia en el conflicto israelí-palestino. Con más de 30,000 personas muertas y un deterioro humanitario alarmante, la necesidad de una solución pacífica y humanitaria nunca ha sido más crítica.

Algo Curioso
El conflicto actual en Gaza es el más mortífero desde la fundación del Estado de Israel en 1948, destacando la prolongada y compleja disputa territorial y política que ha caracterizado las relaciones israelí-palestinas durante décadas.

Divergencias Profundas Obstaculizan Avance en Diálogos

A medida que las negociaciones se extienden sin resultados concretos, las discrepancias entre las demandas de Hamas y las condiciones impuestas por Israel se hacen más evidentes. Por un lado, Israel insiste en la liberación de un grupo específico de rehenes, incluyendo 40 individuos entre ancianos, enfermos y mujeres, como condición previa para cualquier acuerdo temporal. Esta demanda se ha convertido en un punto de fricción, dado que Hamas ha condicionado la liberación de rehenes a la entrada sin restricciones de ayuda humanitaria y al retorno de los desplazados palestinos.

Por otro lado, el número de rehenes aún en cautiverio sigue siendo motivo de preocupación internacional. Según el gobierno israelí, aproximadamente 134 personas, capturadas durante el ataque del 7 de octubre y conflictos anteriores, permanecen en manos de Hamas. Entre ellos, se cree que 19 mujeres y dos niños están entre los cautivos, y al menos 32 se consideran fallecidos. La complejidad de la situación se ve agravada por la posibilidad de que algunos rehenes estén en poder de grupos más radicales que Hamas, como la Yihad Islámica Palestina, lo que complica aún más las negociaciones.

El impacto humanitario del conflicto ha sido devastador. Más de 30,000 personas han perdido la vida debido a las acciones militares, y la infraestructura de Gaza ha sufrido daños irreparables. La salud pública está en un estado crítico, con el Ministerio de Salud controlado por Hamas reportando más de 72,000 heridos, incluyendo una gran cantidad de mujeres, niños y ancianos. La situación se ve exacerbada por el bloqueo, que ha limitado severamente la entrada de alimentos, medicinas y suministros esenciales, acercando a la región al borde de una catástrofe humanitaria.

Mientras tanto, la comunidad internacional, incluidos los Estados Unidos, Egipto y Qatar, continúa sus esfuerzos de mediación, instando a ambas partes a llegar a un compromiso que permita aliviar la crisis humanitaria y sentar las bases para una paz duradera. Sin embargo, la intransigencia en ciertas demandas ha llevado a un punto muerto que parece difícil de superar en el corto plazo.

Benjamín Netanyahu - Primer ministro de Israel

Ramadan Se Acerca: Urgencia por Aliviar la Crisis Humanitaria

El acercamiento del Ramadan añade una capa adicional de urgencia a las negociaciones. Este período sagrado, que comienza en la primera semana de marzo, es tradicionalmente un tiempo de reflexión y oración, pero en el contexto actual, también representa un plazo simbólico para alcanzar algún tipo de alivio humanitario para la población de Gaza. La posibilidad de un acuerdo que permita una tregua durante este mes sagrado se ve como una oportunidad para facilitar la entrada de ayuda humanitaria a gran escala y permitir un respiro temporal a los millones de afectados por el conflicto.

Sin embargo, la logística de implementar tal acuerdo enfrenta obstáculos significativos. La identificación y liberación de rehenes, la coordinación de la ayuda humanitaria, y el regreso seguro de los desplazados son procesos complejos que requieren cooperación y confianza mutua, recursos que escasean en el actual clima de hostilidades. Además, la necesidad de garantizar que la ayuda llegue efectivamente a quienes la necesitan, sin ser desviada o bloqueada, presenta un desafío logístico considerable.

La presión internacional sobre Israel para aumentar el flujo de asistencia humanitaria a Gaza ha crecido, con declaraciones del Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, subrayando la necesidad de "maximizar todos los medios posibles" para llevar ayuda a la población. Este llamado se ha traducido en airdrops coordinados por EE.UU. y Jordania, que han entregado decenas de miles de raciones de alimentos, aunque esta medida sigue siendo insuficiente ante la magnitud de la necesidad.

“Netanyahu no quiere llegar a un acuerdo y ahora la pelota está en el campo de los estadounidenses”,

- Basem Naim, jefe de la división política de Hamas en Gaza.

Mar 5, 2024
Colglobal News

Las negociaciones para establecer un cese al fuego en la franja de Gaza han entrado en un estado de estancamiento a medida que se acerca el inicio del Ramadan, la fecha límite no oficial para alcanzar un acuerdo. Durante dos días de conversaciones en El Cairo, las partes involucradas no han conseguido romper el impasse, principalmente debido a la ausencia de una delegación israelí en la última ronda de negociaciones. Este estancamiento ocurre en un momento crítico, dado el deterioro humanitario en Gaza y la presión internacional para evitar un mayor derramamiento de sangre.

A pesar de los esfuerzos de mediación liderados por Egipto, Qatar y Estados Unidos, las demandas de ambos lados han complicado el progreso hacia un acuerdo. Hamas ha exigido la entrada de ayuda humanitaria a gran escala en Gaza y el retorno de los palestinos desplazados de sus hogares, especialmente en el norte del territorio costero. Por otro lado, Israel solicita la liberación de los rehenes capturados durante el ataque sorpresa de Hamas el 7 de octubre de 2023, como parte de un acuerdo de tregua que inicialmente duraría seis semanas, comenzando con el mes de Ramadan.

Las conversaciones en El Cairo, marcadas por la urgencia del inminente Ramadan, han resaltado la complejidad de las negociaciones. A pesar de la presencia de la delegación de Hamas y los esfuerzos de los mediadores internacionales, la falta de consenso y la reticencia de Israel a participar directamente en la última ronda han puesto de manifiesto la dificultad de alcanzar una paz duradera. La situación se ve agravada por el bloqueo indefinido impuesto por Israel y Egipto desde que Hamas ganó las elecciones legislativas en 2007, lo que ha convertido a Gaza en lo que muchas organizaciones de derechos humanos describen como la prisión a cielo abierto más grande del mundo.

A medida que las negociaciones continúan, la comunidad internacional observa con preocupación la posibilidad de que el conflicto se intensifique durante el Ramadan, un período que históricamente ha visto un aumento en la violencia en el conflicto israelí-palestino. Con más de 30,000 personas muertas y un deterioro humanitario alarmante, la necesidad de una solución pacífica y humanitaria nunca ha sido más crítica.

Las negociaciones para establecer un cese al fuego en la franja de Gaza han entrado en un estado de estancamiento a medida que se acerca el inicio del Ramadan, la fecha límite no oficial para alcanzar un acuerdo. Durante dos días de conversaciones en El Cairo, las partes involucradas no han conseguido romper el impasse, principalmente debido a la ausencia de una delegación israelí en la última ronda de negociaciones. Este estancamiento ocurre en un momento crítico, dado el deterioro humanitario en Gaza y la presión internacional para evitar un mayor derramamiento de sangre.

A pesar de los esfuerzos de mediación liderados por Egipto, Qatar y Estados Unidos, las demandas de ambos lados han complicado el progreso hacia un acuerdo. Hamas ha exigido la entrada de ayuda humanitaria a gran escala en Gaza y el retorno de los palestinos desplazados de sus hogares, especialmente en el norte del territorio costero. Por otro lado, Israel solicita la liberación de los rehenes capturados durante el ataque sorpresa de Hamas el 7 de octubre de 2023, como parte de un acuerdo de tregua que inicialmente duraría seis semanas, comenzando con el mes de Ramadan.

Las conversaciones en El Cairo, marcadas por la urgencia del inminente Ramadan, han resaltado la complejidad de las negociaciones. A pesar de la presencia de la delegación de Hamas y los esfuerzos de los mediadores internacionales, la falta de consenso y la reticencia de Israel a participar directamente en la última ronda han puesto de manifiesto la dificultad de alcanzar una paz duradera. La situación se ve agravada por el bloqueo indefinido impuesto por Israel y Egipto desde que Hamas ganó las elecciones legislativas en 2007, lo que ha convertido a Gaza en lo que muchas organizaciones de derechos humanos describen como la prisión a cielo abierto más grande del mundo.

A medida que las negociaciones continúan, la comunidad internacional observa con preocupación la posibilidad de que el conflicto se intensifique durante el Ramadan, un período que históricamente ha visto un aumento en la violencia en el conflicto israelí-palestino. Con más de 30,000 personas muertas y un deterioro humanitario alarmante, la necesidad de una solución pacífica y humanitaria nunca ha sido más crítica.

Algo Curioso
El conflicto actual en Gaza es el más mortífero desde la fundación del Estado de Israel en 1948, destacando la prolongada y compleja disputa territorial y política que ha caracterizado las relaciones israelí-palestinas durante décadas.

Divergencias Profundas Obstaculizan Avance en Diálogos

A medida que las negociaciones se extienden sin resultados concretos, las discrepancias entre las demandas de Hamas y las condiciones impuestas por Israel se hacen más evidentes. Por un lado, Israel insiste en la liberación de un grupo específico de rehenes, incluyendo 40 individuos entre ancianos, enfermos y mujeres, como condición previa para cualquier acuerdo temporal. Esta demanda se ha convertido en un punto de fricción, dado que Hamas ha condicionado la liberación de rehenes a la entrada sin restricciones de ayuda humanitaria y al retorno de los desplazados palestinos.

Por otro lado, el número de rehenes aún en cautiverio sigue siendo motivo de preocupación internacional. Según el gobierno israelí, aproximadamente 134 personas, capturadas durante el ataque del 7 de octubre y conflictos anteriores, permanecen en manos de Hamas. Entre ellos, se cree que 19 mujeres y dos niños están entre los cautivos, y al menos 32 se consideran fallecidos. La complejidad de la situación se ve agravada por la posibilidad de que algunos rehenes estén en poder de grupos más radicales que Hamas, como la Yihad Islámica Palestina, lo que complica aún más las negociaciones.

El impacto humanitario del conflicto ha sido devastador. Más de 30,000 personas han perdido la vida debido a las acciones militares, y la infraestructura de Gaza ha sufrido daños irreparables. La salud pública está en un estado crítico, con el Ministerio de Salud controlado por Hamas reportando más de 72,000 heridos, incluyendo una gran cantidad de mujeres, niños y ancianos. La situación se ve exacerbada por el bloqueo, que ha limitado severamente la entrada de alimentos, medicinas y suministros esenciales, acercando a la región al borde de una catástrofe humanitaria.

Mientras tanto, la comunidad internacional, incluidos los Estados Unidos, Egipto y Qatar, continúa sus esfuerzos de mediación, instando a ambas partes a llegar a un compromiso que permita aliviar la crisis humanitaria y sentar las bases para una paz duradera. Sin embargo, la intransigencia en ciertas demandas ha llevado a un punto muerto que parece difícil de superar en el corto plazo.

Benjamín Netanyahu - Primer ministro de Israel

Ramadan Se Acerca: Urgencia por Aliviar la Crisis Humanitaria

El acercamiento del Ramadan añade una capa adicional de urgencia a las negociaciones. Este período sagrado, que comienza en la primera semana de marzo, es tradicionalmente un tiempo de reflexión y oración, pero en el contexto actual, también representa un plazo simbólico para alcanzar algún tipo de alivio humanitario para la población de Gaza. La posibilidad de un acuerdo que permita una tregua durante este mes sagrado se ve como una oportunidad para facilitar la entrada de ayuda humanitaria a gran escala y permitir un respiro temporal a los millones de afectados por el conflicto.

Sin embargo, la logística de implementar tal acuerdo enfrenta obstáculos significativos. La identificación y liberación de rehenes, la coordinación de la ayuda humanitaria, y el regreso seguro de los desplazados son procesos complejos que requieren cooperación y confianza mutua, recursos que escasean en el actual clima de hostilidades. Además, la necesidad de garantizar que la ayuda llegue efectivamente a quienes la necesitan, sin ser desviada o bloqueada, presenta un desafío logístico considerable.

La presión internacional sobre Israel para aumentar el flujo de asistencia humanitaria a Gaza ha crecido, con declaraciones del Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, subrayando la necesidad de "maximizar todos los medios posibles" para llevar ayuda a la población. Este llamado se ha traducido en airdrops coordinados por EE.UU. y Jordania, que han entregado decenas de miles de raciones de alimentos, aunque esta medida sigue siendo insuficiente ante la magnitud de la necesidad.

PODRÍA INTERESARTE
 

No tienes acceso

Necesitas una membresía para acceder al contenido de este sitio.
Por favor Regístrate o Ingresa