Durante los últimos días, grandes contingentes de tropas de la Fuerza de Defensa de Ruanda (RDF) han cruzado de manera secreta hacia el este de la República Democrática del Congo (RDC). Estas fuerzas están apoyando a los rebeldes del M23 en su ofensiva sobre Goma, la capital regional. La situación, reportada el 25 de enero de 2025, ha generado una tensión significativa en la región y ocurre en vísperas de una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU programada para el domingo.
Los informes indican que tropas de la RDF han estado cruzando hacia la RDC y concentrándose a pocos cientos de metros del centro de Goma. Los altos mandos de la RDF permanecen en la ciudad de Gisenyi, muy cerca de Goma. Fuentes confiables señalan que el ejército ruandés está listo para invadir.
El sábado se registraron intensos combates entre las fuerzas del M23 y el ejército congoleño en las afueras de Goma. Trece cascos azules de la ONU han perdido la vida en estos enfrentamientos: nueve son de Sudáfrica, tres de Malaui y uno de Uruguay. Otros cuatro soldados resultaron heridos. La línea del frente se está aproximando peligrosamente a Goma, pasando cerca de campos de refugiados que albergan a más de un millón de desplazados por la violencia.
Fuentes del ejército congoleño reportaron que lograron frustrar una ofensiva importante respaldada por Ruanda durante la noche. Aunque las defensas de Goma están resistiendo, existe la preocupación de que Ruanda trate de tomar la ciudad antes de que el Consejo de Seguridad de la ONU pueda reaccionar efectivamente.
En respuesta a la escalada, el gobierno de la RDC ha ordenado la retirada de sus diplomáticos de Ruanda y ha exigido que Ruanda cese sus actividades diplomáticas y consulares en Kinshasa en un plazo de 48 horas, según una carta filtrada del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha adelantado una reunión de emergencia para abordar la crisis. En 2012, cuando el M23 capturó Goma, la milicia se retiró rápidamente bajo presión internacional. Sin embargo, esta vez se teme que Ruanda busque mantener el control de la ciudad antes de que una respuesta internacional efectiva pueda ser organizada.
Antes del reciente incremento en el despliegue de tropas, se estimaba que hasta 4,000 miembros de la RDF operaban dentro de la RDC. Además, hay advertencias de que Ruanda podría intentar apoderarse de Bukavu, otra ciudad estratégica situada al sur del lago Kivu, una vez que tenga el control de Goma.
La insurgencia del M23, activa en una región rica en minerales, ha ganado terreno este año. La semana pasada, los rebeldes capturaron Minova, una ciudad crucial en las rutas de suministro de Goma. Además, tomaron Sake, ubicada a 12 millas de Goma, anteriormente clave en la defensa contra el M23. Estos avances han puesto en peligro el suministro de alimentos y bienes básicos a Goma.
Clémentine de Montjoye, de Human Rights Watch, expresó que la situación es crítica, con combates reportados al norte y oeste de Goma, y una creciente escasez de servicios esenciales como agua y electricidad. La gran afluencia de civiles en busca de refugio aumenta la presión para que todas las partes protejan a los civiles y la infraestructura, y aseguren el acceso a la ayuda humanitaria.
Analistas han criticado la falta de una respuesta adecuada de Occidente, subrayando la necesidad de contener al presidente ruandés, Paul Kagame. La Unión Europea ha instado a Ruanda a cesar su apoyo al M23 y a retirar sus fuerzas. Aunque el gobierno ruandés ha negado su respaldo al M23, aún no ha emitido una respuesta oficial sobre estas acusaciones.