El veneno de la avispa brasileña Polybia paulista contiene una molécula denominada Polybia-MP1 (MP1), que ha sido objeto de estudio por su capacidad para atacar selectivamente células cancerosas. Según la investigación liderada por Paul Beales (Universidad de Leeds) y João Ruggiero Neto (Universidad Estatal de São Paulo), publicada el 1 de septiembre de 2015 en Biophysical Journal, MP1 puede eliminar células cancerosas generando agujeros en sus membranas, permitiendo así la fuga de componentes esenciales como proteínas y ARN. Este mecanismo, que no afecta a las células normales, se debe a la distribución anómala de ciertos lípidos en las membranas de las células malignas.
Durante el estudio, se identificó que la fosfatidilserina (PS), sobreexpuesta en la superficie de las células cancerosas, incrementa la unión del péptido MP1 a la membrana entre 7 y 8 veces. A su vez, la fosfatidiletanolamina (PE) potencia la creación de grandes poros, aumentando su tamaño entre 20 y 30 veces respecto a células sin esta composición lipídica. Estos poros se forman en cuestión de segundos y son lo suficientemente amplios para permitir la salida de moléculas vitales, comprometiendo de inmediato la viabilidad celular.
MP1 también demostró su potencial más allá del cáncer, siendo capaz de interrumpir las membranas de bacterias patógenas. En pruebas de laboratorio, el péptido logró inhibir el crecimiento de células cancerosas de próstata, de vejiga y células leucémicas resistentes a múltiples tratamientos farmacológicos. Pese a estos resultados prometedores, los autores del estudio advierten que aún se requieren investigaciones adicionales para comprender plenamente el mecanismo de acción del MP1 y determinar su viabilidad para aplicaciones clínicas en oncología.
Con estos hallazgos, el MP1 del veneno de la avispa Polybia paulista refuerza las posibilidades de desarrollo de nuevas terapias anticancerígenas que actúen directamente sobre los componentes específicos de las membranas celulares de tumores, permitiendo enfoques más selectivos y menos perjudiciales para el tejido sano.