En mayo de 2025, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) y la Administración Nacional de Productos Médicos de China (NMPA) concedieron la aprobación para que la empresa XellSmart inicie un ensayo clínico de fase I con una terapia celular regenerativa destinada a personas con lesiones de la médula espinal (SCI, por sus siglas en inglés). Esta aprobación llega después de más de cuatro años de investigación preclínica y se enmarca en la estrategia de XellSmart de desarrollar tratamientos basados en células madre pluripotentes inducidas (iPSC) alogénicas, capaces de transformarse en células especializadas e intervenir en la restauración de tejido neurálgico tras una lesión medular.
La fase I del ensayo clínico se llevará a cabo en el Tercer Hospital Afiliado de la Universidad Sun Yat-sen, reconocido por su liderazgo en el tratamiento de lesiones de la médula espinal en China. El objetivo primordial de esta etapa es evaluar la seguridad y la eficacia preliminar de la terapia. Se proyecta que la fase I se extienda hasta 2026; de resultar exitosa, la fase II podría comenzar en 2028.
Este tratamiento, calificado como "listo para usar", elimina la necesidad de recolectar células del propio paciente, lo que permite acelerar la producción y simplificar el acceso a potenciales beneficiarios. Este avance resulta relevante ante la alta carga de enfermedad que representan las lesiones medulares: más de 15 millones de personas viven con SCI a nivel global, mientras que solo en China se registran anualmente cerca de 100,000 nuevos casos, y en Estados Unidos se suman aproximadamente 18,000 por año. En cifras horarias, estos significan casi 10 diagnósticos nuevos cada 60 minutos en China y dos en Estados Unidos.
La SCI suele afectar principalmente a adultos jóvenes y de mediana edad, siendo los accidentes de tráfico, las lesiones deportivas y otros traumas las causas más frecuentes. El impacto va más allá del ámbito físico, con importantes repercusiones en la integración social y en la salud mental de los pacientes. Desde el punto de vista económico, los gastos en atención médica y cuidados de por vida para una persona con lesión medular pueden superar el millón de dólares en países de altos ingresos, una carga significativa para los sistemas de salud.
La terapia en cuestión aprovecha las iPSC alogénicas con el fin de reemplazar las neuronas dañadas o muertas, diferenciándose de otras alternativas que dependen del material celular del paciente. Esta estrategia “todo en uno” facilita tanto el proceso de fabricación como la administración clínica.
Este proyecto clínico forma parte de un portafolio más amplio: XellSmart ha recibido previamente autorizaciones regulatorias para siete ensayos clínicos en fase de registro de terapias derivadas de iPSC, incluyendo indicaciones para la enfermedad de Parkinson y la esclerosis lateral amiotrófica (ALS).
Con la culminación prevista para 2026 de esta fase inicial y la perspectiva de avanzar hacia la siguiente etapa en 2028, el enfoque de ciencia traslacional podría acercar nuevas opciones terapéuticas a un segmento creciente de pacientes que, hasta ahora, cuentan con pocas alternativas con impacto reparador sobre el tejido nervioso medular lesionado.