El 8 de junio de 2025, a las 8:08 a.m. (hora local), un sismo de magnitud 6,5 sacudió el territorio colombiano. El epicentro se localizó a unos 90 kilómetros al este de Bogotá, en la cara oriental de la cordillera de Los Andes, específicamente en Paratebueno, Cundinamarca. El Servicio Geológico Colombiano precisó que el sismo fue superficial, con una profundidad inferior a 30 kilómetros.
Las autoridades informaron que no se reportaron heridos graves ni daños significativos en las infraestructuras tras el sismo. Sin embargo, una persona fue atendida por crisis de ansiedad y trasladada al Hospital Central. Se registraron algunos daños leves en estructuras y cortes temporales de energía, pero el servicio eléctrico ya fue restablecido.
La ciudadanía fue instada por el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, a reportar cualquier novedad a la línea de emergencias 123. En Paratebueno, dos réplicas perceptibles ocurrieron tras el evento principal: la primera a las 8:20 a.m., con magnitud de 4,0, y la segunda a las 8:37 a.m., con magnitud de 4,6.
Colombia experimenta una alta sismicidad por la convergencia de la placa Sudamericana, la placa Nazca y la placa Caribe. Según datos oficiales, el país registra en promedio cerca de 50,000 sismos al mes, aunque la mayoría no son perceptibles por la población. La ubicación de las principales ciudades en la cordillera o en los valles aledaños aumenta la vulnerabilidad frente a movimientos telúricos.
En el pasado, terremotos de magnitud similar han causado daños significativos en otras regiones del país. Un caso relevante fue el sismo ocurrido en Armenia en 1999, de magnitud 6,2, que resultó en la muerte de casi 1,000 personas y cuantiosos daños materiales. En esta ocasión, las autoridades permanecen en alerta y continúan evaluando la situación, aunque hasta el momento el balance preliminar es de afectaciones mínimas.