Desde su fundación en 2016, Seabin ha evolucionado de ser una solución simple para limpiar puertos, marinas y puertos con su “skimmer de basura” a convertirse en una operación enfocada en datos altamente sofisticada. La empresa ha logrado un hito de $1 millón en ingresos recurrentes anuales, principalmente a través de la venta de datos de impacto ambiental, colaborando con marcas globales como Yamaha, IBM, Patagonia, y Veolia, así como con clientes gubernamentales como el Departamento de Defensa de Australia y la Ciudad de Sídney.

El modelo de negocio de Seabin experimentó un giro significativo en 2020, permitiendo a la empresa generar ingresos a partir de datos ambientales. Este cambio estratégico ha facilitado la colaboración con corporaciones globales, ofreciendo datos de reparación de la naturaleza creíbles y transparentes, lo que añade valor a los portafolios de sostenibilidad de sus clientes mientras se mantiene fiel a su misión de impactar positivamente en el océano.
La nueva oferta de productos financieros basados en datos de Seabin promete insights valiosos sobre la contaminación oceánica, operando de manera similar a los créditos de carbono pero enfocándose en microplásticos en lugar de carbono. Esto no solo permite a las empresas alineadas con sus valores apoyar la remoción de plásticos del océano y recibir informes detallados de impacto para sus propósitos de marketing o sostenibilidad, sino que también abre puertas para que los cuerpos gubernamentales y corporaciones que trabajan con recursos oceánicos comprendan mejor la problemática de la contaminación por plásticos y tomen decisiones más informadas.